El martes el concejal de Hacienda de Orihuela, Rafael Almagro (PP), aseguró que el presupuesto estaba casi cerrado con Ciudadanos (C's) y ayer el portavoz naranja, Juan Ignacio López-Bas, compareció para explicar que aquello que este dijo era una verdad a medias porque sí es cierto que han participado pero no que exista un acuerdo. El edil no se anduvo por las ramas y explicó el precio que su partido pondrá a un «sí» antes incluso de que lo supiera el alcalde, Emilio Bascuñana, quien ayer seguía de feria, en Fitur. Ciudadanos, en algunos aspectos de sus propuestas, actúa con la lógica del que ve las cosas desde fuera del gobierno, caso de dar solución a la situación que se ha generado en el área económica, con un enfrentamiento entre el jefe de Intervención y ediles populares; en otros intenta colar sus proyectos, como sería la Gerencia de Urbanismo; sin olvidar que Orihuela es desde hace años una Gran Ciudad, que no se reconoce como tal, porque no tiene un desarrollo reglamentario. Además también intenta resolver uno de los grandes olvidos de los tres anteriores alcaldes: la aprobación de una Relación de Puestos de Trabajo (RPT) que está pendiente desde hace 19 años.

López-Bas fue ayer un buen socio de gobierno porque no dijo cuánto es el presupuesto del equipo de gobierno ni de dónde saldrá la financiación para el mismo, si están de acuerdo con impuestos o tasas o si estas subirán o bajarán. Se limitó a explicar sus condiciones para que el PP tenga los votos que le faltan y, gracias al pacto que firmaron en su día, puedan sacar a la ciudad de un atasco de tres años prorrogando presupuestos.

La primera demanda que citó ayer López-Bas son los grandes proyectos porque en el capítulo 6 aparecen pero no se sabe en qué consistirán. «Queremos profundizar sobre el destino de esas partidas porque se ha dejado muy en el aire su destino y deben estar en el listado y establecidos porque hay compromisos adquiridos políticamente, como el Centro Cívico de La Aparecida, inversiones en la costa... y no dejar las grandes inversiones a la espera de remanentes a partir de mayo. Queremos saber qué obras se van a realizar y no dejarlo abierto», explicó. Ciudadanos también quiere que se apruebe de una vez por todas la RPT y la mejor prueba de que esto sea así es que figure en el presupuesto su coste: «Dicen que está avanzada y negociándose pero no vamos a aprobarlo si no hay RPT. Creemos que Recursos Humanos tiene una persona competente y es el momento de acelerar ese trámite».

Área

Más espinoso podrá ser la reorganización del área económica pero López-Bas dijo que es fundamental porque «no se puede consentir una pelea entre políticos y funcionarios de Intervención ni mucho menos un ayuntamiento lo debe permitir» y propuso cuatro departamentos independientes: Intervención, Tesorería, Contabilidad y Oficina Presupuestaria. Un órgano, dijo, «organizado y coherente» y advirtió que es tan necesario como una realidad el que este mes los proveedores tampoco saben a estas alturas si van a cobrar. «Hay una guerra más que latente», sentenció.

Y Ciudadanos quiere un gerente al frente de Urbanismo, área que se quedó como propia el alcalde y que está paralizada, y que su responsable salga de un funcionario o de un profesional con, al menos, cinco años de ejercicio en la empresa privada. López-Bas dijo que allí hay dos asuntos a desbloquear más que urgentes: «El PGOU, del que no tenemos noticia; y los instrumentos para el desarrollo del Plan Dusi», para los que se ha solicitado financiación europea. C's quiere que esta gerencia funcione con autonomía pero con democracia a través de un consejo rector con la participación de todos los grupos.

El edil también se refirió a la reorganización de las dependencias y servicios en Orihuela Costa, «allí falta personal y medios. No se prestan servicios de manera integral» y recordó que cuando pactaron la gobernabilidad con el PP ofrecieron la colaboración de la edil Luisa Boné y «no se nos ha respetado ese ofrecimiento con la buena fe que pusimos». Por último, López-Bas quiere que Orihuela funcione como Gran Ciudad para lo cual es preciso poner en marcha todos los mecanismos de una gran población. «No firmaremos sin la aprobación del Reglamento de Participación Ciudadana, la Ordenanza de Transparencia y buen gobierno, se constituya la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones y se ponga en marcha el Consejo de Turismo».