La principal amenaza del banco de germoplasma no es otra que la del propio palmeral en sí: la plaga de picudo. De hecho, de las 315 palmeras plantadas en el campus de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela, «ya han muerto un par de ejemplares». Por tanto, la investigación para acabar con la plaga es otro de los frentes abiertos por los investigadores. Actualmente, se está probando una nueva técnica que consiste en plantar especies de menta o geranio alrededor de las palmeras, unas plantas «con un fuerte olor que enmascaran al de las palmeras, ya que el picudo se guía por el olfato». En las próximas semanas experimentarán con el hongo Beauveria bassiana, que actu?a como pato?geno contra el picudo. i. j. iniesta
SEMANA SANTA
Las procesiones de Jueves Santo en la provincia de Alicante