Alcalde de gobierno coral en tierra de habanera, el cargo parece haber cambiado el carácter de José Manuel Dolón. Terco hasta el final en la oposición asegura ahora que solo puede emplearse en convencer a los demás de sus ideas. «Sin golpes en la mesa».
Los presupuestos de 2016 se están elaborando,¿Van a ser participativos, como pedía en la oposición?
Trabajamos para elaborar los nuevos presupuestos y para tener en marcha los nuevos contratos de recogida de basura y transportes a principio de año. Éste último municipalizado. Cuando empecemos a gestionar nuevos presupuestos y estos contratos, la gente sabrá que el cambio ha comenzado en Torrevieja. Soy partidario a ultranza de abrir los presupuestos a la gente. Implicaría un retraso, pero lo haría y lo asumiría. Así se lo he planteado al concejal de Hacienda. Y que la gente, por ejemplo, que vino de Las Torretas, vea cómo son las cuentas.
¿Pero se va a hacer o no?
El alcalde está por esa vía, aunque la decisión es de la interventora. Al final son los técnicos los que mandan más que los políticos. Podrían estar del 1 al 15 de diciembre, hacer un despliegue de esas características, irte a los barrios...
¿Podrán decidir los vecinos el destino de algunas partidas presupuestarias?
La máxima participación que podemos hacer hoy día es informar. Porque los vecinos vienen con ideas muy concretas de cada uno de sus problemas y deberían tener una visión global. Deben saber qué cuesta el sueldo de los funcionarios y de todos los servicios.
¿Cómo se ven los mismos problemas que uno ha denunciado como oposición durante 20 años cuando es alcalde?
Los problemas son los mismos, el prisma diferente. Los problemas desde aquí, en la Alcaldía, tienen solución. Desde la oposición no. Tienes más información, más medios, más posibilidades. Otro tema son los tiempos. Tienen solución pero necesitamos tiempo. Todo funciona con pautas, marcadas y cerradas. Por ejemplo, los presupuestos. Desde aquí tienes el convencimiento de que la hay, aunque la situación es complicada y está claro que estamos en minoría, y gestionar el mal gobierno de tantos años es muy difícil. Aunque no me gustaría seguir hablando de la herencia. Yo estoy muy a gusto con la gente que estoy. Incluso con los que están metiendo la pata... Yo la meto también, y espero que en esos casos ellos estén también a gusto conmigo. Aquí no hay nadie que ande por encima del agua.
Tras cien días de mandato da la sensación de que en un gobierno de cinco partidos hay algunos que deciden por su cuenta y van a su aire...
Este gobierno no es ni jerárquico, ni tiene un líder indiscutible que anule a los demás. Está formado por la suma de muchos, sean partidos o sean personas. Asumí la alcaldía sabiendo que no era un alcalde al uso. Entendí que soy el alcalde de una serie de políticos y políticas que vienen de diferentes orígenes, de diferentes partidos, y cada uno tiene una ideología, un programa...
Nunca pensé ser alcalde, pero empezamos (tras las elecciones) a aproximarnos, y una de las propuestas era yo, y asumí que iba a ser alcalde con esas circunstancias. Por eso digo que no soy al uso, no soy autoritario, ni alcalde que pueda pegar un puñetazo en la mesa. Tengo que convencer y que tengo que ceder, no mucho poder... a veces todo. Sin ningún inconveniente.
En la ciudad donde más se construyó de España en dos décadas ¿ No ha venido ningún conocido promotor a recriminarle que vaya a revisar el PGOU después de 30 años?
Al alcalde no ha venido nadie ni a quejarse, ni a decir que es una locura, que vamos a paralizar las obras, ni que no es momento, ni si es momento. Cuando gobernaba el PP, cuando se construía, no era momento porque se paralizaban las obras. Y cuando llegó la crisis... no era momento para el PP y no se quería tramitar un PGOU porque estaban muy conformes ellos con el diseño de ciudad que tenían, con el diseño y las posibilidades que les daba de esa negociación tú a tú... Nosotros hemos entendido que ya no hay momento, que el momento es éste.
¿Pero tienen una estimación de cuánto puede durar ese proceso?
El plazo de revisión será lo que dure... Y puede ser largo. Una revisión del PGOU puede llegar a tres años. Y ahora la Generalitat va a estar totalmente con nosotros. Ya era hora...bastante tiempo ha pasado, y bastante tiempo ha tenido la gente que está implicada en el sector urbanístico inmobiliario constructivo, para que ahora nos digan ¿Qué hacen ustedes? Pues nada... que lo digan... Con la misma legitimidad les decimos que nosotros hacemos lo que venimos proponiendo desde hace muchos años.
Mientras que se aleja, parece, la posibilidad de una moción de censura, le habrá llegado que muchos piensan que puede ser alcalde los cuatro años... -el acuerdo es dos años Los Verdes y dos el PSOE (Fanny Serrano)-.
Mucha gente me dice: «¡Chico! ¡Tú tienes que ser los cuatro años....!» Que si tú eres de aquí... que si tal... Y o tengo asumido que el día que tenga que dejar la vara de mando, la silla, o como se quiera llamar, la alcaldía, cuando asumo un pacto o un compromiso, la palabra compromiso me gusta más, no lo incumplo. Si tiene que ser otra persona, lo va a ser. Sin ningún inconveniente.
Si las cosas cambian de aquí a allá y tengo que seguir, pues seguiré muy a gusto si la salud me lo permite. Igual que he estado aquí para ser alcalde sin proponérmelo, estaría aquí para seguir siendo alcalde sin proponérmelo tampoco. Pero mi compromiso es que dentro de dos años me tengo que ir.
¿No considera incompatible presidir la Fundación López Dols y que al mismo tiempo el Ayuntamiento que preside deba decidir sobre el proyecto de construcción de un edificio promovido por esa fundación en el centro de Torrevieja?
La Fundación entrega sus cuentas dos veces al año, la memoria, el presupuesto, la propuesta de presupuesto, luego hace una dación de cuentas... Yo para dar un paso que no sea normal tengo que pedir permiso a la Conselleria. Yo soy el presidente. No le veo ninguna (incompatibilidad).
El proyecto es un edificio nuevo. Ayer lo presenté aquí al equipo de gobierno. Hay unos promotores que quieren hacerlo a cambio de obra. Nos dan tres plantas. Ellos se quedarían con la planta baja y la primera planta y nosotros nos quedaríamos con tres plantas. (Y se respeta la fachada esa) Totalmente.
