Las negociaciones entre el Ayuntamiento de Orihuela y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), organismo dependiente del Ministerio de Fomento, para la firma de un convenio sobre las obras del trazado que permitirá el tren de Alta Velocidad Española (AVE) y su impacto en el casco urbano continúan abiertas después de seis largos años de negociaciones en los que han participado hasta tres corporaciones distintas sin llegarse a acuerdo alguno.

De hecho, ayer el alcalde, Emilio Bascuñana, anunció tras una reunión con los portavoces de cada uno de los partidos que forman la Corporación que el nuevo borrador del convenio remitido por Adif ha rebajado el montante que debe asumir el Ayuntamiento desde los seis millones de euros a 998.000 euros. La eliminación del cuarto paso hacia Correntías -valorado en 3,5 millones de euros y «algo que solo quería el anterior concejal de Urbanismo», dijo el regidor-, la eliminación del borrador de las obras de la CV-95, al ser una vía propiedad de la Generalitat y «el ajuste una vez ejecutadas gran parte de las obras a su precio real», según apuntó Bascuñana, son las responsables de esta drástica rebaja en el precio que tendrá que pagar Orihuela porque la ciudad mejore su estética urbanística tras las obras.

Sin embargo, Bascuñana no está conforme con este borrador y remitirá una nueva propuesta a Adif que recoja que todos los desperfectos originados por las obras queden subsanados en un plazo «no muy alto», así como el hecho de que sea la adjudicataria quien se encargue también de la reurbanización de la losa. Y todo por escrito. El proyecto en sí, en cualquier caso, aún está por definir porque serán los ciudadanos quieren presenten sus propuestas sobre qué quieren a través de una encuesta desde la página web y que podrá cumplimentarse hasta el 31 de diciembre.

Negociadores

En cualquier caso, el objetivo es que el convenio esté cerrado «antes del 20 de diciembre», fecha marcada para las elecciones generales ya que «los negociadores serán otros» y todo lo anterior podría quedar en papel mojado. El alcalde reconoció que es «difícil» llegar al 20 de diciembre con un acuerdo cerrado, pero «se hará con la mayor celeridad posible». Otro de los puntos en el aire y que podría retrasar aún más la firma del convenio pasa por la forma de pago de esos 998.000 euros. Y otro de los aspectos por resolver pasa por los 5.000 metros de suelo edificable que pide Adif para el pago de los 998.000 euros, ya que se trata de la misma superficie que pedía cuando el montante ascendía a 2,5 millones de euros.

«Aún no sabemos si habrá 5.000 metros cuadrados, más, o menos. Es una estimación. En su momento se valorará si son 998.000 euros o más, y si es así, Adif devolverá la diferencia al Ayuntamiento de Orihuela». La recalificación de estos terrenos para hacerlos edificables también deberá pasar por pleno, y la partida de 998.000 euros que deberá dejarse como aval, debe incluirse en el presupuesto, «antes de 36 meses, según fija el convenio, al que ha tenido acceso este diario, por lo que es otra paso más que hay que cumplir.