Efectivos de los bomberos continuaron trabajando durante toda la jornada de ayer en el incendio que arrasó durante la noche del miércoles una empresa de productos congelados en Orihuela por causas que todavía se desconocen. Aunque el fuego se dio por controlado a media noche, todavía a primera hora de la mañana de ayer se podía ver una columna de humo y las labores se centraron en refrescar el perímetro que fue pasto de las llamas, una tercera parte de los 9.000 metros cuadrados que ocupa la empresa.

El empresario Antonio Ródenas explicó que tratarán de llevar la producción de Congesa (Congelados Españoles SA) a otra nave industrial para seguir con el trabajo aunque no pudo ofrecer más explicaciones sobre qué pasará con los 115 trabajadores. Todavía no se han cuantificado las pérdidas economicas que ha supuesto este suceso, aunque más de 80.000 kilos de frutas y verduras y parte de la maquinaria quedó inservible. El fuego se declaró cuando todavía quedaban trece trabajadores en la zona de producción que pudieron salir con rapidez, por lo que no se produjeron heridos. Las llamas se expandieron rápidamente debido a que en el interior de la fábrica había 4.000 litros de aceite y 1.500 litros de gasoil. Ayer, las fuerzas de seguridad seguían controlando el perímetro aunque no se vio afectada la circulación en la Nacional 340.