¿Es distinta la situación de asistencia a las personas solas y enfermas en Torrevieja con respecto a otras zonas del país?

Cuando mantuvimos un convenio de colaboración con el Hospital de Torrevieja fuimos conscientes de la necesidad de atención a estas personas que hay en la ciudad. Muchísima. En Elche, por ejemplo, todavía los pacientes mantenían algún lazo afectivo con algún familiar. Aquí son personas extranjeras que están totalmente solas, viudas, sin familia, incluso con gente que muere sola y abandonada en su casa.

¿Qué trabajo se realiza con esas personas?

Somos la familia de quien no tiene. No somos acompañantes. Somos su familia. Estamos todo el tiempo con ellos. Si están en cuidados paliativos, todos los voluntarios tenemos formación sociosanitaria para atenderlos. Pero damos sobre todo la parte emocional, que es la más importante. Incluso acompañando a morir. Que vean cumplida su ilusión por vivir en un ambiente familiar y recibir comprensión, cariño y ternura. El convenio ha concluido y fue una experiencia para intentar sacar adelante el hogar.

¿Cuál es el objetivo de la entidad en Torrevieja?

Promovemos el programa de Hogar de Acogida dirigido a las personas gravemente enfermas y en fuerte situación de exclusión social. En Torrevieja se planteó al anterior equipo de gobierno la disponibilidad de terrenos y ahora vamos a intentarlo con el actual.