Si usted acude hoy a la Playa Babilonia de Guardamar del Segura sepa que se encontrará una zona de 640 metros lineales vallada y con carteles que indican «prohibido el paso» por tratarse de una zona «peligrosa para el baño y para caminar». El Ayuntamiento ejecutó ayer el cierre de este espacio entre protestas de los vecinos amparándose en informes técnicos que alertan del peligro por las casas en ruina, el mal estado de la acera y la acumulación de escolleras en la arena que fueron colocadas ilegalmente para proteger las viviendas que están junto al mar.

La actuación se acometió a primera hora de la mañana de ayer por parte de una brigada municipal y bajo la supervisión de agentes de la Policía Local que acudieron para evitar incidentes con los vecinos, que rechazan que esta sea la solución y piden que se acometa un proyecto de regeneración, algo que reivindicaron ayer desplegando una pancarta. Así, se vivieron algunos momentos de tensión con los operarios que instalaron el vallado debido a que varios propietarios de las viviendas ubicadas sobre la arena exigieron que no se enganchara ningún elemento a sus fachadas.

Las vallas se han colocado en el tramo que se extiende desde el número de casa 47 hasta el 197 y no sólo se impide el acceso a la zona de baño, sino que también se ha pedido a los residentes que «no hagan uso del acceso particular que cada vivienda tiene a la playa por motivos de seguridad».

La concejala de Playas, Ana Martínez, mantiene que la decisión se ha tomado con el beneplácito de la Dirección de Costas y puesto que el Ayuntamiento es responsable de mantener la seguridad en las zonas de baño. El consistorio pedirá ahora a Costas que retire todos los elementos de la playa que sean peligrosos y que acometa una rehabilitación integral. Hasta entonces la playa seguirá cerrada.