Alfonso García toma de nuevo las riendas del Club Balonmano Almoradí como nuevo presidente, tras abandonar la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de la ciudad en las pasadas elecciones municipales, donde ha ejercido como edil del gobierno local durante los últimos ocho años. El club deportivo ha conseguido, recientemente, el ascenso a la liga Primera Nacional.

García, de 49 años de edad, tiene una amplia experiencia en la gestión deportiva. Durante sus anteriores ocho años como presidente del club consiguió tres ascensos, siendo el más sonado el de División de Honor B. También consiguió dos campeonatos de Liga Nacional, así como la promoción del balonmano entre los más jóvenes.

Tras las pasadas elecciones municipales, García ha pasado a ser concejal del Ayuntamiento de la localidad, pero en la oposición, lo que no le imposibilita las tareas de Presidente. Tras la oferta del club de asumir de nuevo la Presidencia y tras unos días de reflexión, aceptó la propuesta, aunque advierte que no es fácil la situación actual del deporte amateur, así como la dificultad de superar los éxitos conseguidos en su anterior etapa.

El nuevo presidente del Club Balonmano asegura que siente una necesidad vocacional de trabajar por el deporte y las personas; y que volver al balonmano es volver a su casa. "Es un reto cargado de ilusión y además con mi equipo de directivos que continúan todos y la incorporación de personas jóvenes que iniciarán una renovación a largo plazo y que pondrán ideas nuevas para mejorar", explica.

"Espero dar un poco de aire fresco al club y realizar actividades para seguir promocionando el balonmano, implicar a todos: jugadores, técnicos, directivos, afición; a trabajar en la promoción del deporte", asegura.