La sorpresa de última hora en la Vega Baja se vivió en San Miguel de Salinas. A pesar de que existía un preacuerdo entre el PSOE, IU y UPyD para arrebatar a los populares de Ángel Sáez la Alcaldía, la candidata magenta comunicó «in extremis» y a solo una hora del inicio de la sesión del pleno de investidura que no iba a sumarse a ese pacto.

El anuncio lo realizó tan solo al líder del PSOE, José Antonio Carrasco, por lo que Bienvenida Campillo, candidata de IU y la elegida por este supuesto tripartito para dirigir el Ayuntamiento, se enteró «en el recuento de votos», dijo, aunque «me lo esperaba», Campillo no pudo evitar emocionarse al concluir la sesión por lo que Carrasco calificó como «una traición» de la líder de UPyD, María José Costa.

La formación se votó a sí misma (dos concejales), por lo que Sáez gobernará en minoría (6 ediles) al recaer los votos de IU (3) y PSOE (3) en Campillo, por lo que el popular abogó por un «mandato de consenso», algo en lo que coincidieron el resto de formaciones.

María José Costa, que abandonó el pleno muy abrumada nada más finalizar la sesión, explicó posteriormente a INFORMACIÓN que «lo que ha pasado es que no se ha llegado a un acuerdo finalmente porque el resto de formaciones no dieron su brazo a torcer en cuanto a rotación de la Alcaldía, a pesar de que en un primer momento se me ofreció ser alcaldesa durante 16 meses», apuntó la letrada y ahora edil.