Hace dos años que comparten sus inquietudes por el mal estado de conservación del castillo de Orihuela a través de las redes sociales, bajo el grupo «Oriolanos a favor de la reconstruccón del castillo», pero ayer dieron un paso para que todas esas reivindicaciones en la nube se transformen en acciones reales gracias al acuerdo de constituirse formalmente como asociación.

Grafitis, deterioro de las construcciones a causa de la nula protección de las infraestructuras y un descuidado general de un patrimonio que data de hace más de mil años y que constituye uno de los elementos culturales más antiguos de la ciudad, son las principales premisas contra las que quiere luchar este grupo que integra a expertos en patrimonio y a personas interesadas por el mantenimiento de estos bienes culturales. La asociación se presentará formalmente en unos días, ya que los asistentes acordaron ayer realizar los trámites pertinentes para constituirse legalmente, así como los cargos directivos de esta asociación. Este acuerdo tuvo lugar tras la asamblea convocada a los miembros de este mismo grupo en la red social Facebook, que tuvo lugar en la Casa del Cristo de la Buena Muerte, que cedió su local para la realización de la asamblea.

Aunque el fin último pasa por la reconstrucción del castillo, que data del siglo XVIII, sus miembros piden que hasta que llegue ese punto se conserve la zona con labores de mantenimiento o se acordone y se restrinja el acceso para evitar su deterioro por pintadas o el paso de las docenas de oriolanos y turistas que cada fin de semana realizan senderismo por el monte de San Miguel.

El grupo buscará también apoyo del Máster en Gestión de Patrimonio que la Universidad de Alicante imparte en Orihuela, ya que ambos proyectos comparten un mismo fin: la conservación del patrimonio artístico y cultural. El colectivo anunciará las medidas que emprenderán en las próximas semanas, cuando finalicen todos los trámites administrativos para empezar a trabajar por la recuperación de lo poco que queda en pie del castillo.