El Ayuntamiento de Rojales anunció ayer que pretende poner en valor de nuevo su noria hidráulica para que vuelva, como antaño, a elevar agua destinada para el riego. La estructura se sitúa en el puente de sillería y ambos fueron construidos entre los siglos XVI y XVIII, constituyendo una de las principales referencias culturales e históricas del municipio. El proyecto prevé eliminar las capas de asfalto del viaducto y arreglar las filtraciones, una labor a la que ya se ha puesto manos a la obra el concejal de Patrimonio, José Pedro Chazarra.

La noria dejó de funcionar hace algunos meses sin que el Ayuntamiento de Rojales sepa los motivos por los cuales se ha producido esta situación. «Se pretende que vuelva a girar de manera natural mediante la fuerza de agua y cumplir su función», explicó ayer el municipio en una nota en la cual añade que, según el edil de Patrimonio, para realizar esta actuación el Ayuntamiento tendrá que coordinarse con la Confederación Hidrográfica del Segura y con los regantes para poder acceder a la toma subterránea de agua y determinar, los motivos de que dejara de funcionar. «Por ello, el cauce del río tendrá que presentar un caudal muy bajo y posibilitar con ello el acceso de los técnicos y empleados municipales al conducto subterráneo», se explica.

Humedades

La noria de Rojales, junto a la de Benijófar, es la única de la comarca que sigue manteniendo su antigua función de elevación de agua para riego. La segunda actuación que afectará al conjunto hidráulico de Rojales se centrará en el puente de sillería. Los trabajos tendrán un doble objetivo: por un lado, verificar humedades y filtraciones de agua que se han detectado entre los sillares de la cara norte del elemento histórico; y, por el otro, también se prevé realizar catas sobre el puente para determinar la profundidad del suelo original y retirar por completo las capas de asfalto y otros materiales modernos para mejorar su aspecto.

A continuación se procederá a la impermeabilización del firme original del puente para evitar las filtraciones que deterioran la piedra. Finalmente se prevé adoquinar el firme del puente y retirar los elementos modernos que cubren los laterales del mismo. «Destacar que el puente de Rojales es el único de carácter histórico que sigue en pie en toda la Vega Baja ya que los demás, desaparecieron debido a las avenidas de agua del río Segura o como consecuencia de los terremotos», concluye el Ayuntamiento.