El temporal marítimo, unido a las bajas presiones, provocó ayer por la tarde daños en 40 metros del paseo marítimo que bordea la playa de los Locos. La Policía Local acordonó la zona para evitar el peligro a los peatones. Las olas, rebasaban toda la franja que ocupa la playa y golpeaban contra el paseo y amenazaban con llevarse por delante puntos de alumbrado.

La profunda borrasca «hinchó la mar» y provocó que el agua se comiera casi diez metros de la playa del Acequión, situada dentro del puerto y resguardada del oleaje. El agua llegó en buena parte de esta playa a la acera que separa los edificios del litoral y las terrazas de los bares y restaurante de la zona, aunque en este caso se trataba de una inundación «pacífica» sin consecuencias. Ese mismo efecto de subida del nivel del mar se hizo notar en los pantalanes de las tres marinas deportivas con miles de puntos de amarre de embarcaciones.