Parece que las tesis del reciclaje y la reutilización la tiene bien asumida la Generalitat Valenciana y más si cabe en tiempos de recortes. Hasta el punto de que el Palacio de Justicia de Torrevieja ha recibido un lote de mobiliario «especial» para suplir las carencias de espacio para archivo de causas, que por miles se apilan en cualquier rincón de todos los juzgados torrevejenses, incluso en carritos de supermercado que sirven para trasladar los expedientes.
La falta de medios materiales de la administración autonómica ha provocado que intente suplir las necesidades de almacenaje y ordenación de asuntos en los juzgados con muebles de segunda mano y que suman más de quince años de vida útil. Se trata de varios muebles de archivo retirados de la Audiencia Provincial de Alicante -que está en obras para renovarse-. Los muebles, que todavía conservan restos del trabajo acumulado en aquella sede judicial, llevan esperando ubicación definitiva desde hace más de una semana en el vestíbulo principal del edificio antiguo del Palacio de Justicia. Fuentes de la Conselleria de Justicia indicaron que el objetivo es destinarlos al saturado juzgado de Lo Penal, que si algo le sobra, son causas pendientes de tramitar.
Habitación del pánico
Hasta tal punto llega la saturación de legajos en despachos y zonas de atención al público en este Palacio de Justicia -uno de los que faena asume del país- que hay una estancia conocida entre los trabajadores como «la habitación del pánico» por contar con columnas de asuntos apiladas hasta el techo. Este Palacio de Justicia se inauguró en 1999. Muy pronto se quedó pequeño. A mediados de la década pasada duplicó sus dependencias con un nuevo edifico anexo. Da servicio a tres juzgados de Primera Instancia y cinco de instrucción, uno de Violencia sobre la Mujer, un juzgado de lo Penal y otro de refuerzo de éste último, entre otras dependencias.
