El pacto entre el PP liderado por la alcaldesa Charo Bañuls y la formación independiente de Aurelio Murcia (UPLC) está más que finiquitado. Prueba de ello es que, tal y como admitió ayer el propio Murcia, el pasado diciembre ofreció a la oposición socialista pactar una moción de censura para arrebatar la vara de mando a su compañera de gobierno. Lo hizo a sus espaldas, pero el acuerdo no se fraguó porque el PSOE rechazó gestionar la administración local bajo la fórmula de un bipartito.

Fue el portavoz del grupo municipal socialista, Raúl Valerio Medina, quien desveló a INFORMACIÓN que Aurelio Murcia contactó con su partido poco antes de las fiestas navideñas para ponerles en bandeja la Alcaldía que perdieron en los últimos comicios y que puso fin a 28 años de gobiernos de izquierdas. El socialista trasladó la oferta a la ejecutiva local de su partido, que acordó por unanimidad que nunca gobernaría de la mano de los dos concejales de UPLC.

El propio Murcia admitió ayer la veracidad de estas informaciones y dijo que «ahora las cosas han cambiado» aunque «no cerramos la puerta a negociar una moción de censura».

Aunque el pacto gobierno bipartito entre el PP y los independientes no se ha roto oficialmente, es una realidad que Charo Bañuls es consciente del intento de traición que promovió su compañero de gobierno y ya no se fia de él. Así las cosas, todo apunta a que Aurelio Murcia no conseguirá el apoyo del PSOE para echar de la Alcaldía a los populares, pero en política y durante los casi dos años de mandato que aún restan podría pasar casi cualquier cosa en Bigastro.