La Generalitat acaba de denegar la licencia de actividad para el Teatro Municipal, en el que se han celebrado decenas de actos públicos, sin que la administración haya actuado desde que fue inaugurado, en junio de 2006, por el entonces presidente del Consell, Francisco Camps, y por el entonces alcalde, Pedro Hernández Mateo. La Conselleria de Gobernación rechaza la petición de licencia, solicitada por el Ayuntamiento el pasado noviembre, al detectar graves deficiencias. El visto bueno de la administración autonómica tenía como objetivo avalar que se pueden realizar espectáculos con afluencia de público sin poner en peligro la integridad de los asistentes.
El informe, firmado por la directora territorial, Araceli Martínez, dice que no es posible determinar cuál es el aforo del recinto, y añade que, el que se calcula, "no se ajusta" a la normativa porque a excepción de los camerinos y el escenario no se puede asegurar una ocupación alternativa, "según se esté realizando un ensayo o una actuación". La Conselleria exige que si el Ayuntamiento quiere obtener licencia de actividad vinculante a su vez para que el recinto cuente con la de apertura, realice un nuevo cálculo del aforo y anticipa que la documentación municipal deberá "determinar nuevas soluciones constructivas, siendo así que el aforo teórico presumiblemente exceda de mil personas". Entre otras subsanaciones, se deberá recoger que todas las puertas "proyectadas" -el informe cita el edificio como si no estuviera construido- permanecerán abiertas mientras existan personas en el interior del local, libres de pasadores y sin ningún tipo de cierre que no sea "antipánico". El texto señala numerosos condicionamientos técnicos más, desde la iluminación y la señalización, hasta la ubicación de los extintores. Por el lenguaje que utilizan los técnicos autonómicos se da a entender que no han visitado el recinto.
Matices
Para la Generalitat, con la documentación aportada, "no se puede acreditar que se cumplan los requisitos y características que para este tipo de locales establece la normativa", por lo que requiere al Ayuntamiento que justifique las carencias. El departamento de Urbanismo lleva algo más de ocho años intentando lograr esta licencia de actividad sin logra el éxito. El expediente está abierto desde mayo de 2004, dos años antes de la inauguración.
El edil de Urbanismo, Francisco Moreno, ha matizado que existe un debate legal en el ámbito urbanístico sobre si una dependencia de titularidad municipal requiere o no este tipo de licencia de actividad para, después, poder obtener la de apertura, pero, en cualquier caso, el Ayuntamiento sí quiere conseguirla.
Una obra que costó 9,8 millones de euros
El Teatro Municipal es el principal aforo local para actos públicos. La obra se adjudicó a Acciona y se contrató por 6.429.191 euros a dos arquitectos de renombre tras el derribo del edificio protegido del antiguo teatro. El desembolso final fue de 9.804.558 euros y el sobrecoste de un 52,50%, con los informes en contra de la oficial mayor y de la funcionaria jefa del área de Contratación, que consideraban "imprescindible" haber realizado una nueva adjudicación ante una modificación presupuestaria de "esta envergadura". El equipo de gobierno se valió de un informe externo puesto sobre la mesa por Acciona para autorizar el pago del sobrecoste. D. P.
