Llegó solo al vetusto edificio del TSJ. Y solo salió en la que era la primera jornada del juicio que por prevaricación y falsedad documental en la concesión del millonario contrato dde recogida de basuras ha sentado al exalcalde de Torrevieja y diputado Pedro Hernández Mateo en el banquillo de los acusados. Con rostro adusto y gesto serio hizo gala de una envidiable mala memoria al responder a las preguntas más comprometidas del Fiscal y la acusación en la que destacó la función de mero firmante de documentos que desarrolló mientras ostentaba el cargo de primer edil. Lejos del cómodo salón de plenos del Ayuntamiento donde durante más de veinte años su palabra y su presencia impusieron su orden y ley, se notaba poco acostumbrado el diputado del PP a un ambiente judicial donde quien da la palabra es otro. Ni delfines ni pupilos estuvieron arropando en Valencia a su mentor. Había pleno ordinario en Torrevieja y es posible que la semana próxima sí puedan acudir al juicio. Tampoco asistieron cargos del partido. Sólo quien fuera su jefe de prensa durante casi una década y el letrado que se hizo cargo del procedimiento en la primera fase del procedimiento le esperaban entre el público. Además al juicio acudió desde Torrevieja, el edil José Manuel Dolón de Los Verdes, el denunciante de los hechos y que esbozó la única sonrisa del día.