El regidor callosino Javier Pérez (PP) desveló ayer que la deuda real del Ayuntamiento supera los 15 millones de euros. La cifra comprende los cerca de 5,5 millones que el consistorio adeuda en facturas impagadas a proveedores más los cerca de 10 millones que hay que devolver a los bancos en concepto de créditos a largo plazo.

Calcular la deuda con proveedores y sacar de los cajones las facturas que carecen de consignación ha sido el primer paso para acogerse el plan de refinanciación del Gobierno. La medida persigue que las entidades municipales puedan sanear sus cuentas y que las empresas reciban las cantidades adeudadas para que fluya la actividad económica. Así, los proveedores pueden consultar desde ayer a través del portal de internet del consistorio callosino si el montante estimado por la concejalía de Hacienda coincide con lo que se les adeuda y, en caso de que existan errores, reclamar.

El alcalde consideró que esa deuda de 5,5 millones es una cantidad "bastante asequible y razonable" si se tiene en cuenta la gran cantidad de inversiones y servicios municipales orquestados desde el consistorio en los últimos años. De igual modo, defendió la gestión de su equipo durante dos legislaturas y dijo que en ese período "apenas se ha generado deuda", ya que cuando cogió las riendas del consistorio en 2003 se debían 3,2 millones de euros, y en la actualidad, entre SUMA y la Generalitat deben más de 2,5 millones.

Opciones

Por su parte, el edil de Hacienda, Manuel Illán, aseguró que ya se está trabajando en el plan de ajuste que tienen que presentar para garantizar que serán capaces de afrontar el pago a proveedores. Explicó existen tres opciones posibles para devolver esos 5,5 millones: a través de un préstamo bancario, de la detracción de los tributos del Estado o una combinación de ambas, y que todavía no han decidido por cuál se decantan.

Preguntado sobre si ese plan obligará al consistorio a prescindir de parte de su plantilla de funcionarios, el alcalde dijo que "espera que no", aunque adelantó que muy probablemente algunos de los servicios municipales que hasta ahora han sido costeados por el Ayuntamiento tendrán que pagarlos los propios usuarios.