El Ayuntamiento de Orihuela ya no hará más contraofertas ni más adelantos de dinero a la UTE concesionaria de la recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria. Es más, no escuchará más peticiones ni cederá a más "chantajes", que es lo que cree el equipo de gobierno que ha sido la huelga. El Ayuntamiento decidió ayer plantarse, dar por muertas las negociaciones e intervenir el servicio de las basuras. El decreto se firmó a última hora de la mañana y -tras dejar unas horas para alegaciones por parte de las empresas- hoy a las 10.30 horas los trabajadores saldrán a la calle a limpiar. La Concejalía de Aseo Urbano, que dirige Pablo Vidal, tomará las riendas tanto de la maquinaria como de la plantilla de las basuras en virtud de ese decreto de intervención que se ha tenido que tomar de urgencia por la situación de insalubridad en la que estaban las calles desde hace cuatro días.

Vidal y la edil de Contratación, Asun Mayoral (ambos de CLr), anunciaron ayer la decisión, que amparan en informes de una técnico municipal de Sanidad, del médico del Ayuntamiento y de la Policía Local para justificar la urgencia. Lo que plantean es que la UTE ha usado la huelga como medida de presión para pedir que se resuelva el contrato y se le paguen 16 millones de euros. El Ayuntamiento se niega a contemplar esa cifra, que Vidal calificó de "injustificada, unilateral y abusiva" y ofreció adelantar 450.000 euros para que la empresa pudiera pagar a sus proveedores y a la plantilla. El detonante de la huelga, de hecho, fue oficialmente que los trabajadores no han cobrado enero porque la empresa dice que no tiene dinero a causa de la deuda del Ayuntamiento. Vidal insistió ayer en que solo se deben tres meses y que la UTE tiene liquidez en sus cuentas para pagar, es más, que ante la oferta de adelantar ese medio millón de euros las mercantiles lo "desecharon tajantemente".

Ante esa situación, planteó que "el Ayuntamiento ha hecho lo que ha podido, ha pagado mensualmente el canon, se ha ofrecido a adelantar dinero para pagar salarios y a proveedores... Ante la insistencia de la empresa de meterlo todo en un mismo saco y no desvincular la desconvocatoria de la huelga de sus pretensiones de resolver el contrato, el Ayuntamiento no ha tenido más remedio que seguir adelante". Así, "teniendo en cuenta que lo que prima es la salubridad y que Orihuela esté limpia", los concejales se reunieron con el Comité de Empresa y le ofrecieron que trabajen a partir de ahora para el Ayuntamiento, al menos los próximos tres meses. El consistorio les pagará enero (después lo detraerá de la factura que tenga que pagarle a la UTE por ese mes) y les garantiza una estabilidad laboral.

Colaborar

Mientras tanto, la UTE no cobrará pero sí está obligada a prestar la maquinaria. Sin embargo, Vidal ya adelantó ayer que no está por la labor de colaborar porque negó la entrada a los técnicos municipales para recoger información sobre seguridad social y nóminas (datos a los que debe facilitarle acceso, según el contrato).

Para cuando pasen los tres meses, el área de Contratación estima que estará resuelto el expediente de resolución del contrato que se inició el 7 de diciembre y tiene que pasar por el Consejo Jurídico Consultivo de la Comunidad. Para entonces, si aún no hay acuerdo económico en cómo saldar la situación, tanto empresa como Ayuntamiento podrán acudir al juzgado a reclamar la indemnización que consideren. "En principio no hay nada más que negociar puesto que las condiciones que la UTE imponía para llegar a un acuerdo son inasumibles para el Ayuntamiento; ,estamos hablando de cantidades fuera de mercado, por trabajos que tienen informes negativos de los técnicos..." dijo Mayoral.

Ayer por la tarde cada empleado tenía que registrar un documento con sus datos personales y manifestando que abandona voluntariamente la huelga para ponerse a las órdenes del Ayuntamiento. El presidente del Comité de Empresa, Miguel Almagro (CCOO) ya había hecho público que para ellos la solución a todos los conflictos sería que la recogida de basuras la gestionara una empresa municipal.