La policía local de Orihuela ha impedido la pasada madrugada que los camiones de residuos de los municipios cercanos de Torrevieja y Albatera (Alicante) y Abanilla y Fortuna (Murcia) echaran la carga en el vertedero de La Murada, en el término municipal.

Así lo ha afirmado hoy uno de los socios de la empresa propietaria de la planta Proambiente, Ramón Fenoll, quien ha acusado al ayuntamiento de Orihuela de boicotearles.

Esta situación se produce poco después de que Proambiente denegara a los camiones de basura del municipio oriolano descargar en la planta por una deuda de, supuestamente, 2,5 millones de euros por parte de la Unión Temporal de Empresas (UTE) de la recogida de residuos, que conforman las mercantiles Sufi, Liasur y Gobancast.

Según Fenoll, desde el consistorio anoche se envió a más de cuarenta agentes de la policía local a las inmediaciones de la planta de eliminación de residuos de La Murada para dificultar el paso de los camiones procedentes de las poblaciones vecinas, que tuvieron que marcharse cargados con las basuras.

"Los policías paraban a todos los camiones, les pedían la documentación y les multaban por cualquier cosa", ha relatado.

El socio de Proambiente ha calificado estos hechos como "medidas desproporcionadas" y ha pedido al equipo de gobierno del ayuntamiento de Orihuela que les deje trabajar.

En relación al problema de la deuda que tiene la UTE que opera en Orihuela, Fenoll ha asegurado que desde Proambiente se ha hecho un "grandísimo esfuerzo" para llegar a un acuerdo ya que, incluso, se ofreció un plan de pagos que finalmente "no ha salido adelante".

Ha reiterado en varias ocasiones que Proambiente no quería llegar al extremo de impedir el paso a los camiones de la UTE oriolana pero ha asegurado que llevan casi dos años sin recibir dinero por parte de la mercantil, lo que hace que la situación sea insostenible.

En esta línea, ha avanzado que su postura con respecto a las basuras de Orihuela se mantendrá hasta que cobrar parte de la deuda o que se establezca un plan de pagos.

A raíz de esta situación y de la huelga de los trabajadores de la UTE por el impago de las nóminas, el ayuntamiento de Orihuela ha decidido intervenir temporalmente el servicio de recogida.

De esta manera, y ante la negativa de Proambiente de recibir los residuos, Orihuela y sus pedanías transportan su basura a la planta de Crevillent, mientras que la de Orihuela Costa irá a la de Xixona.