En torno a unas quince mil toneladas de sal están saliendo de Torrevieja todas las semanas a través de grandes embarcaciones desde el inicio de la campaña de exportación abierta el pasado mes de septiembre. Desde entonces hasta la fecha es raro no ver a un mercante aguardando turno para ser cargado y esperando anclado fuera de la dársena portuaria torrevejense.

A lo largo de esta semana, con un día festivo en las instalaciones salineras, zarpará rumbo a Noruega un carguero con cuatro mil toneladas de sal y otra embarcación se llevará otras tantas hasta un puerto de Galicia, esperándose la llegada para el próximo domingo del granalero "Mariner". Se trata de grandes buques especializados en la carga de mercancías secas a granel. En este caso serán veintidós mil las toneladas que se llevará en sus bodegas hasta el país africano de Camerún. Las instalaciones de la línea Arrendataria de las Salinas de Torrevieja (NCAST), empresa perteneciente al multinacional francesa Salins du Midi están consideradas como la "joya de la corona" del citado grupo. Ubicadas en el contradique de Poniente de la dársena portuaria local pueden alcanzar una capacidad de carga cifrada en cuatrocientas cincuenta toneladas hora.

La mayor parte de la sal exportada por la empresa salinera tiene como destino los países nórdicos, donde este producto es utilizado para combatir el hielo en aceras y calzadas. También Reino Unido utiliza la sal torrevejense con los mismos fines, aunque en diversos países es empleada en la industria de salazones y la química.

Ya el pasado año fue bueno para la exportación de sal pues el anterior del 2009 debido a los fuertes y continuadas olas de frío que padeció europa la empresa salinera, cuya producción anual, la más voluminosa de España en sal marina, se sitúa por encima de las setecientas mil toneladas. En el pasado ejercicio la salinera se quedó sin existencia. Este año, gracias a la ausencia (hasta ahora) de lluvias torrenciales en la ciudad y se entorno, a lo que se añade la elevación de la media de las temperaturas, espera sobrepasar la citada producción.

Para evitar situaciones de desabastecimiento como las ocurridas en ejercicios anteriores, los proveedores europeos están haciendo acopio de sal, cuando a estas alturas del mes de diciembre el frío y la nieves no han aparecido con la fuerza y la virulencia de otros finales de otoño.

También por carretera

En la actualidad la empresa que explota la laguna salinera de Torrevieja es la única a nivel del país preparada para abastecer de sal en caso de nevadas copiosas como ya ha ocurrido en otras ocasiones. Torrevieja, por unos días, se convierte también en el principal punto de transporte de sal por carretera con la llegada y carga de camiones de gran tonelaje desde todos los puntos del país.

Competencia contra más de cien países productores

?Que Torrevieja -y por derivación- la Comunidad Valenciana son las máximas productoras de sal de España e incluso de Europa no deja de ser un tópico. Cierto es que es que cuenta con una de las mayores productoras de sal marina del país, y una explotación de sal marina estratégica -por su ubicación junto a un puerto en el que pueden atracar grandes buques y porque puede producir durante casi todo el año- pero Cantabria, por ejemplo, pone en el mercado casi 1,5 millones de sal gema todos los años, según el último informe del Instituto Geominero de España. Es más, se trata de un artículo relativamente fácil de producir y, por supuesto, de adquirir. Más de cien países en el mundo producen sal. Frente a los cuatro millones de toneladas que genera esta industria en España, de las que 700.000 proceden de Torrevieja (entre el 15 y 20% del total nacional , según el año), Alemania produce 16 millones, China, 58 y Estados Unidos otros 46. Francia, Holanda, y Reino Unido producen más sal que España.

Otro tópico. "La sal se destina al consumo humano". No más del 25% del total va a parar a ese uso alimentario. El resto se reparte en la fabricación de productos químicos, el deshielo de carreteras, jabón, plástico, papel, pinturas, cosméticos, medicamentos, pilas eléctricas, curtido de pieles o como aditivo de la industria cerámica. Y es necesaria para esos usos y -otras diez mil aplicaciones- en cantidades industriales. D. P.