Documentos municipales y expedientes "frescos", salidos de las entrañas burocráticas del Ayuntamiento, algunos decretos, registros de entrada y salida y más. Parte de las tripas de una maquinaria en la que trabajan casi 900 personas expuestas a los medios de comunicación en rueda de prensa en algo que no había sucedido, de este modo, en el Ayuntamiento de Torrevieja. Por eso la breve alusión a este asunto, también en rueda de prensa, del alcalde Eduardo Dolón (PP) no pasó desapercibida ayer.

"Algunos tendrán que dar explicaciones sobre de dónde han sacado documentos", dijo Dolón, que el primer edil entiende que no son públicos. "Algo de lo que tendremos que hablar en un futuro".

El regidor se refería a las supuestas filtraciones de documentación y que han dejado "a cuadros" a algunos concejales del equipo de gobierno del PP. Se trata de escritos oficiales de los que no hay constancia de solicitud formal, aseguran, algo poco habitual para la muy compleja legislación de acceso a la documentación pública. Cuando el concejal delegado de Transportes dijo que el dinero de la tarjeta ciudadana se estaba ingresando correctamente en una cuenta de la CAM, el edil de APTCe, Domingo Soler le entregó el documento que demostraba que se había estado haciendo en otra entidad días ante. Soler también demostró que el contrato del transporte escolar estaba rescindido desde el 2 de agosto cuando el equipo de gobierno todavía estaba rumiando cómo comunicarlo. Y hay más ejemplos también en las filas del PSOE y Los Verdes, aunque en menor medida. La oposición defiende esta estrategia asegurando que todos han sido obtenidos por el cauce legal. Otra cosa es que la forma de trabajar no fuera habitual. Se trata de una práctica habitual en otros ayuntamientos, con o sin autorización. Es el pan de cada día en otros municipios, gobierne quien gobierne y se utilizado de forma intensiva por los grupos de la oposición. Pero parece que en este caso el equipo de gobierno del Partido Popular se ha encontrado con una "cuña de su misma madera".