Las tensiones del Partido para la Costa (Claro) con Clr, y en algún caso el PSOE, han sido constantes desde que comenzó el actual mandato municipal, aunque todos los implicados las negaban ayer de forma tajante. Antonio Cerdán, quien es el asesor del Ayuntamiento para los temas de la costa y persona de total confianza de Houliston, dijo a este periódico que "de ese asunto no hablamos" sin desmentirlo.

Lo cierto y verdad es que la sede del Ayuntamiento en Orihuela Costa iba a ser cosa de Claro porque consideraban que sus 1.200 votos habían sido claves en la derrota de Mónica Lorente. Pero lo cierto es que los representantes de CLr aterrizaron pronto allí para ocupar despachos y dependencias que Claro consideraba propias.

En este tiempo a Claro le ha tocado lidiar con lo peor de la gestión municipal en Orihuela, la avalancha veraniega, las quejas sempiternas de quienes pagan impuestos durante un año y vienen a disfrutar de su segunda residencia un mes con unos servicios que deja mucho que desear. Y, sobre todo, con la limitación de autonomía a la hora de decidir algunas cuestiones. Pero también ha habido tiempo para los agravios. Como el ya citado de Cala la Mosca, olvidándose Antonia Moreno (PSOE) de Claro en su lucha contra la urbanización cuando en realidad ellos realizaron el trabajo y la recogida de firmas para elevarlas a la Unión Europea.

secretario general de claro

Veloso: "No me consta que el PP haya vuelto a tentarlo"

El secretario general de Claro, Modesto Veloso, quiso despejar dudas ayer. "Formamos una pacto de cuatro partidos muy distintos, desde el punto de vista ideológico y de funcionamiento, pero los únicos que podemos decir que hay problemas somos nosotros. No nos vale con las versiones de los demás o lo que diga el PP". Veloso añadió que Claro está trabajando por Orihuela y, sobre todo, "por mejorar Orihuela Costa que era nuestro objetivo desde el principio". Negó cualquier conflicto que pudiera invalidar el acuerdo de gobierno e incluso aseguró que no hay "grandes asperezas. Durante estos meses se ha ido viendo qué le correspondía a cada uno según sus competencias y hemos seguido adelante. Nosotros sabemos lo que hay dentro y hablamos desde dentro", aseguró. "Hay tranquilidad absoluta", reseñó. Sobre si el concejal Houliston ha vuelto a recibir "cantos de sirena" por parte del Partido Popular, aseguró que no tiene constancia. No toda la militancia de Claro es de la misma opinión, aunque en general se valora que es muy improbable que el PP pueda cuajar una moción de censura con Claro. Otra cosa es que Houliston deje el gobierno local. Claro juega con ventaja. Sabe que Lorente "está muerta políticamente" si no logra arrebatar la alcaldía a Monserrate Guillén. Y no necesita un aliado. Sólo un disidente. D.P.