La "junta de gobierno de mercadillos" que debería velar por la organización de estas actividades en Orihuela no ha llegado a convocarse desde que se aprobó la ordenanza en 2008, normativa local que ha quedado desfasada por no contemplar cuatro de los once mercadillos que se instalan semanalmente en el municipio y sus pedanías. Esa junta debería estar formada por miembros de la Policía Local, técnicos municipales y una representación de los mercaderes. El concejal del área, Juan Ignacio López-Bas (Clr), desconoce por qué nunca se ha reunido, pero dijo que en todo caso la ordenanza está desfasada también porque la ley europea pide que los puestos se asignen en un procedimiento con publicidad por subasta.

López-Bas matizó ayer la información de la Concejalía sobre los mercadillos que escapan al control municipal: Son los de Desamparados, La Campaneta, Entre Naranjos y Torremendo (es decir, el mercadillo de San Bartolomé si se instala legalmente). Aclaró que la ordenanza contempla siete (y no ocho) y que en total hay once (y no doce), como se informó inicialmente.