El funcionario policial, Manuel Bailén, ha formulado una reclamación al Ayuntamiento por "funcionamiento anormal de la administración pública". Solicita una indemnización, por daños físicos, psíquicos y morales, de 50.000 euros. La demanda se basa en que, en septiembre de 2010, la ex alcaldesa, Trinidad Martínez, emitió un decreto que declaraba nulo el acto de nombramiento de Inspector de la Policía de Bailén, formalizado en mayo de 2007 tras aprobar una oposición. Martínez era entonces concejal de Policía Local. Por ello Bailén que volvió a ocupar la plaza de oficial.

En su escrito indica que durante la prueba a inspector los responsables municipales "incurrieron en una absoluta y palmaria falta de diligencia mínimamente exigible, que ha dado lugar, a actuaciones rayanas en la temeridad y negligencia manifiestas, por haber consentido, permitido y actuado en el proceso de selección de forma dolosa (...)". Se ha constatado, añade, "la defectuosa constitución de los miembros del tribunal de oposición, al estar integrado por siete miembros y no nueve, como establecía la convocatoria". Esta "vulneración de la legalidad" motivó tres años después, la emisión de un dictamen de nulidad del proceso, que afectó a Bailén, ante "la negligencia del ayuntamiento". El resultado fue la nulidad del nombramiento y el perjuicio causado al demandante por al expectativa de haber superado la prueba como la frustración posterior de conocer la nulidad.