La concejal de Personal habla y no se cansa de cómo gestionaba el anterior equipo de gobierno del Partido Popular a los cientos de funcionarios en el Ayuntamiento de Orihuela. Ayer, 24 horas después de que el PP la acusara de discriminar a uno de ellos, la edil salió para explicar un nuevo proyecto, una ludoteca para los hijos de los funcionarios, que se financiará sola porque este dinero procede de la productividad de trabajadores del Ayuntamiento que se les ha retirado porque, en su opinión, no se la ganaban o, sencillamente, era ilegal. La concejala está trillando los departamentos uno por uno y, aunque algunos nombres ya los conocía ella o algún compañero, lo cierto y verdad es que ayer volvió a explicar que no sale de su asombro.

"Decir que estoy maltratando a un funcionario de la casa (del Ayuntamiento) y que estoy ajustando las cuentas es mentira", dijo segura de sus palabras al tiempo que explicaba que este empleado cobraba una productividad cuando desempeñaba una función que no le correspondía porque estaba asignado a un área distinta y a una actividad incompatible. El caso concreto es el de un conserje que estaba en el área de Turismo y cuya misión era preparar la asistencia a las ferias y certámenes. "Cobraba la productividad todo el año, el desplazamiento, el hotel, las dietas y hasta se le pagaba (desde el Ayuntamiento) el minibar". Ahora, cuando Mayoral le ha dicho que tenía que trabajar como lo que es, un conserje, se ha encontrado con que ni tan siquiera sabe manejar un ordenador. Aunque Mayoral no lo dijo ayer, esta persona entró en el área de Turismo hace años, cuando el responsable era Manuel Lorente, el padre de Mónica Lorente. Por si fuera poco, el funcionario tenía una veintena de faltas de asistencia sin justificar (no había fichado) y la única contestación que dio a la concejala fue que "en esos días iba a preparar la campaña electoral", aunque no dijo de qué partido.

A Asun Mayoral no le tiembla el pulso con ninguno de los doce casos de trabajadores a los que ha retirado la productividad con cantidades que llegaban a los 800 euros al mes. Al funcionario antes citado le ha abierto un expediente y todo hace indicar que el trabajo de la concejala de Personal aún está incompleto porque no es fácil saber cuántos funcionarios están bien o mal asignados porque el Ayuntamiento a día de hoy carece de una Relación de Puestos de Trabajo con lo que incumple la legislación en material laboral.

Objetivo

Mayoral dijo que, igual que le quita la productividad a unos se les dará a otros porque su objetivo es "hacer justicia y dar un trato de igualdad a todos", explicaba. La concejala también desmintió, tal y como aseguró hace unos días el concejal David Costa, que haya funcionarios a los que se les ha quitado este plus sin comunicárselo. "Costa ha sido concejal de Personal y sabe que eso es falso" al tiempo que reiteró que muchos trabajadores del Ayuntamiento, la inmensa mayoría, hacen su labor y que una pequeña parte -de momento ya son 12- se beneficiaban de prebendas dadas por el Partido Popular, a algunos, desde hace años.

La concejala también presentó ayer un proyecto que tendrá un coste cero y dirigido a los funcionarios: una ludoteca a la que puedan acudir sus hijos en verano, Semana Santa o Navidad, compatibilizando la actividad familiar y laboral. El proyecto de Mayoral tiene una segunda lectura después de lo que se ha encontrado este mes de agosto: La inmensa mayoría de funcionarios estaba de vacaciones y, en esta situación, el Ayuntamiento es difícilmente gobernable. Se supone que a partir de que ponga en marcha el servicio tendrá argumentos para lograr que no todos se vayan en las mismas fechas porque los hijos ya no serán una excusa.