Con una mirada que refleja una dura vida a sus espaldas, Ahmed y Fadili reiteran su agradecimiento a la solidaridad de los españoles y, en particular, de los alicantinos. Fadili, además, lo hace en un perfecto español que afirma, aprendió bajo bandera española "cuando el Sáhara todavía era una colonia" y exhibe como prueba su documento de identidad. El saharaui, que ha recibido una prótesis que cubre su tercio medio de pierna, relata cómo han sido recibidos con los brazos abiertos en Los Montesinos desde su llegada: "Todos se han volcado con nuestra causa, trayéndonos aquí para mejorar nuestra vida y ofreciéndonos un piso donde alojarnos", afirma.

Ahmed, por su parte, no se arranca a hablar puesto que no conoce el español, pero a través de otro saharaui, quiere hacer oír su profundo agradecimiento "por todo lo recibido" que, asegura, le permitirá mejorar en el desempeño de sus labores de profesor que, hasta ahora, realizaba diariamente con el tercio medio del fémur amputado y con la ayuda de una muleta. Sus casos, que relatan en una reunión improvisada en el piso que los acoge en Los Montesinos junto al delegado del Frente Polisario en Alicante, Uali Mojtar y su familia, Mohamed Abdalahi, responsable de la atención a los mutilados, Esther Vicens, concejala de Servicios Sociales del consistorio montesinero y miembros de la ONG Compromiso Sáhara, son sólo un ejemplo de la situación que viven cientos de personas en dos hospitales situados en los campamentos de refugiados de Argelia y que Compromiso Sáhara lleva tratando de mejorar desde el año 2000.

Fue entonces, cuando en un viaje a los campamentos se decidió hacer algo "por una parte olvidada de la sociedad como eran los mutilados por las minas antipersona de la guerra", afirma Manuel Alonso, presidente de la ONG. Desde entonces, el proyecto ha crecido, habiendo traído en lo que va de año a 12 personas a las que se ha concedido una prótesis, y esperando a 4 más para este mes de septiembre.

La estancia se realiza en uno de los tres pisos que la asociación tiene en Crevillent, Alicante y en el nuevo de Los Montesinos que, con la llegada de Ahmed y Fadili se acaba de inaugurar y que ha donado de forma altruista una vecina del municipio que prefiere mantenerse en el anonimato. La duración, como señala Nereida Miralles, secretaria de la ONG, "depende de las necesidades sanitarias de los afectados", aunque en estos dos casos será de 30 días. Una labor que necesita mucha ayuda y, que en esta ocasión la ha logrado en la Concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Los Montesinos -que se ha encargado de habilitar las instalaciones de fontanería del piso y de proveer de comida a los saharauis- y del Hospital General Universitario de Elche, gracias al cual ambos han recibido los implantes y los tratamiento rehabilitadores "para volver a su lugar de origen con mayores posibilidades de desenvolverse en su vida cotidiana", recalca Alonso. Asimismo, no hay que olvidar al Hospital de Torrevieja, al Vega Baja o al del Vinalopó, así como a la Fundación Rotary que prestan su ayuda de forma altruista.

Duras condiciones

Durante la tertulia, entre alfombras y té, Abdalahi, también mutilado de guerra y con una prótesis colocada en el Hospital de Elche, relata las duras condiciones de su pueblo tras 36 años viviendo "en campos de refugiados compuestos por tiendas de tela donde las temperaturas, en ocasiones sobrepasan los 50 grados".

Alonso, por su parte, cuenta casos espectaculares que ha presenciado en sus visitas a los campamentos, como el de un chico joven que llevaba una prótesis "desequilibrada que pertenecía a un muerto y que se ajustaba con diversas prendas" o el de un hombre que se había creado su propia prótesis con "pedazos de piel de camello". Mientras, el delegado del Polisario pide "más apoyo" para cubrir las necesidades de su pueblo "hasta que se determine su situación en el mapa internacional". Historias que impactan y que animan a estos voluntarios a seguir con su trabajo por estas personas.

Academia de prótesis en el desierto

Aunque pueda parecer sencillo, el proceso para traer a los mutilados a España es muy largo. En primer lugar, una comisión multidisciplinar formada por un médico rehabilitador, un fisioterapeuta y una enfermera de los diversos hospitales colaboradores trasladan a los campamentos saharauis para determinar, junto a la Asociación Central de Mutilados de Guerra los casos que necesitan atención prioritaria y que tienen una mayor disponibilidad de documentación. El viaje, además, se utiliza para transportar materiales a los hospitales de los campamentos y para tratar a personas con otro tipo de discapacidad que también reciben la ayuda de la organización. Tras ello, llega el momento de organizar el viaje, la estancia y las necesidades de estas personas, a la vez que se trabajan otros proyectos como la acogida de niños durante las vacaciones que la ONG lleva a cabo desde hace años.

El futuro de Compromiso Sáhara pasa ahora por llevar allí el proceso de protetización. Cruz Roja está construyendo instalaciones en el Hospital Martir El Sheriff para fabricar prótesis que culminarán en noviembre, fecha en la que la ONG alicantina tomará el relevo "para enseñar a los saharauis a brindar a los mutilados sus prótesis o a reemplazarlas", ya que, como señala Abdalahi, "su vida suele durar unos tres años". Así, "con el proyecto se podrán solucionar los casos más leves y los saharauis serán capaces de pescar con su caña en lugar de darles el pez", recalca por último Alonso. M. J. Á.