La reforma de la Ley Electoral plantea este año un escenario nuevo para la campaña, con nuevas reglas que deben seguir los partidos pero también con nuevas oportunidades para denunciarse a diestro y siniestro. Y es que hecha la ley, hecha la trampa, y candidatos de uno y otro signo político cometen infracciones casi a diario para inclinar la balanza a su favor y después enarbolan sentencias de la Junta Electoral para demostrar cuán desleal es el contrario. Las llaman "triquiñuelas" si son propias y fraudes de ley" si quien las comete es el rival político.

La Junta Electoral no da abasto y se reúne constantemente de urgencia para resolver en pocas horas las decenas de denuncias que se cruzan los partidos políticos de cada municipio en la comarca, con el ánimo de llegar a tiempo para impedir comportamientos desleales. Aunque puede haber sanciones si la infracción es grave, en la mayoría de casos -y eso lo saben bien los partidos- el pecado ya está cometido y no se puede dar más que un tirón de orejas acompañado de un "no lo vuelva usted a hacer". En el caso de Orihuela diversas fuentes aseguran que el PP ha sido blanco de una docena de denuncias, algunas por inauguraciones "encubiertas" (la ley prohibe cortar cintas 55 días antes de las elecciones). La alcaldesa, Mónica Lorente, "presentó" la sede de la Centuria Romana en Semana Santa o "abrió" la feria comercial "Oriexpo" el pasado jueves. Ninguno de estos eventos fueron convocados como inauguraciones, pero la oposición entiende que lo son y denunció. Aunque ahora ya una sentencia sirve para poco.

Requerimiento

Ayer la popular Pepa Ferrando mostró la resolución de la Junta Central que requiere a Los Verdes, PSOE y Centro Liberal Renovador "que procedan a la retirada inmediata" de los pasquines contra el PP buzoneados por todo el término municipal hace unos días. Ferrando cargó contra "el tripartito" opinando que con sus "acciones carroñeras" no hacen más que "incumplir sistemáticamente las leyes y las reglas del juego". Aseguró la edil que la Junta Electoral les prohíbe distribuir más folletos porque supone una "mala praxis del juego democrático". Añadió que el PSOE pegó carteles la noche anterior fuera de los espacios autorizados "ensuciando las calles" y generando un gasto al erario público para retirarlos.

Desde CLr, PSOE y LV se entendía ayer que la resolución de la Junta Electoral lo que dice es que repartieron los pasquines fuera del plazo de la campaña, y que desde que dio comienzo (ayer) pueden seguir haciéndolo si quieren, aunque la sentencia ordena "que se impida su difusión en el futuro".

Con todo, lo cierto es que los folletos ya están en la calle y para la oposición la denuncia del PP juega a su favor: "Ahora todo el mundo se ha enterado de los pasquines y viene a pedirnos", se jactaban. Los socialistas, por su parte, se disculparon por los carteles pegados en tres contenedores con un argumento que parafraseaba a la edil popular Mayte Valero en un acto de conciliación anteayer por supuestas calumnias al candidato de CLr: "No se enfade señora Ferrando, ha sido de buena fe". Por un calentón de "emotividad y afectividad" de los militantes, añadían los socialistas.

Y al final, las resoluciones de la Junta Electoral van de un lado a otro sin que nadie les de importancia. Suponen más bien un altavoz, así que los partidos acaban pensando "denuncia, que algo queda".