Al sol, la playa, la piscina y el chiringuito hay que sumar un nuevo tópico veraniego: La protesta vecinal. Desde hace unos años, los veraneantes que eligen la costa oriolana para pasar sus vacaciones invierten su tiempo libre en protestar contra la falta de servicios e infraestructuras. Cuando no es por un escape de aguas fecales es por un desprendimiento de rocas o por la falta de una pasarela sobre la nacional 332, como fue el caso de ayer.

Cerca de 50 residentes de la urbanización La Regia de Orihuela Costa asistieron al pleno ordinario del mes de julio para mostrar su disgusto por no poder pasar de un lado a otro de la carretera sin descuidar su seguridad. Aunque la población de este núcleo supera los 500 habitantes, unos 187 constituyen la Asociación de Vecinos Área de La Regia.

Los integrantes de este colectivo acudieron al pleno con pegatinas en las que se podía leer el escueto lema "Pasarela". Todos aplaudieron la intervención de la concejal socialista Rosa Martínez en la que pidió que se construya el paso superior. Y todos abuchearon al concejal de Playas, José Antonio Aniorte, cuando aseguró que los residentes pueden cruzar por tres puntos distintos.

Aniorte ni siquiera pudo terminar su intervención, ya que los vecinos le cortaron con gritos de: "mentiroso" y "no hay derecho". Asimismo, a la salida de la sesión plenaria, los vecinos rodearon al concejal de Playas para increparle por su falta de gestión para la construcción de la pasarela.

Los vecinos desecharon la idea de cortar la carretera (como ha ocurrido en otras ocasiones) o concentrarse en algún punto para expresas su malestar, por lo que decidieron acudir al pleno de ayer. Sus intervenciones espontáneas cortaron el ritmo del debate en varias ocasiones y, aunque la alcaldesa les mandaba callar, no dudaron en hacer comentarios en voz alta sobre lo que se hablaba en los asientos de la Corporación.

Alguno de ellos reconoció que la solución a sus problemas pasa por empadronarse en Orihuela para poder votar en las elecciones municipales. Y no precisamente al PP.

Dependencias municipales

Ya que el Pisuerga pasaba por Valladolid, los vecinos apoyaron al concejal de CLR, Pedro Mancebo, que presentó una moción en la que pedía el reconocimiento del derecho de los partidos de la oposición a disponer de un despacho en la sede que el Ayuntamiento tiene en el litoral.

El portavoz adjunto del Gobierno local, David Costa, negó la solicitud de CLR porque no hay "posibilidades funcionales" de que la sede costera albergue un despacho de la oposición. En medio del murmullo general, uno de los vecinos del público le llamó "mentiroso" ante la mirada impávida de la alcaldesa, que ni siquiera mandó a callar al espontáneo.