Ni el Rey ni Miguel Hernández. Una mujer y por primera vez desde que se tiene constancia del acto, en el siglo XIV. Su nombre es María del Carmen Martínez Grau y, quien no la conozca, es que nunca ha vivido las fiestas de Orihuela. La alcaldesa de Orihuela, Mónica Lorente, reunió ayer a la junta de portavoces para dar a conocer que "una rabalochera, nacida en Monserrate" será la primera mujer que tenga el honor de portar el estandarte de guerra sobre el cual en gran medida gira las Fiestas de la Reconquista. Como dato histórico queda que, además de las concejalas que ya tienen ese honor, en el Ayuntamiento sólo consta otra fémina que lo haya portado: La actual alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en el año que se nombró Síndico a la senyera valenciana que, curiosamente, durmió esa noche en casa de la nueva Síndica.

María del Carmen Martínez tiene detrás de sí una bella historia, casi de cuento. Nacida en uno de los barrios más humildes y queridos de Orihuela y de profesión costurera, terminó casándose con el conde de la Granja. No por ello dejó su taller de hilo y aguja, en el que sigue trabajando y tejiendo trajes de fiesta, de Moros y Cristianos y de nazarenos de Semana Santa. La Síndica fue Armengola 1995 y durante 12 años vicepresidenta de la Asociación Festera a la que sigue ligada.

Miércoles

Ayer a esta mujer alegre en el rostro se le dibujaba casi un poema de felicidad mientras recibía todo tipo de parabienes. "Es un orgullo y un privilegio", decía. Lorente la llamó el miércoles por la noche a una reunión y el jueves, delante de su marido y su hija, la comprometió. "¿Que qué dice mi marido?. Lo ha aceptado con gusto, está tan feliz como yo". María del Carmen no pasa por alto que abre una puerta de igualdad y por ello añadía: "Soy la primera, pero espero no ser la última. La mujer es la que tira de la fiesta. Estoy contenta por mí, pero también por mucha gente que trabaja calladamente por estas fiestas, a la que no se ve, pero ahí está".

Mónica Lorente no sólo anunció que en pleno extraordinario que se celebrará el viernes próximo se procederá al nombramiento. También que, tal y como quería el grupo municipal del PP, se propondrá y aprobará que Miguel Hernández sea Síndico Honorario. Un cargo que desde las filas de la oposición se asegura que Lorente se ha sacado de la manga para no hacerle un feo al poeta en el año que ellos -PSOE, CLR y LV- propusieron que la familia del oriolano más universal fuera la que portara la enseña. Lorente se defiende asegurando que este título está, incluso, documentado.

Por otro lado, el Ayuntamiento aún no ha desvelado cuándo se pasarán los honores entre las banderas. En 2009 anunció que la antigua enseña, tras una costosísima restauración a cargo de la Conselleria de Cultura, tendría que vivir a partir de ahora entre algodones después de siglos de batallas -nunca mejor dicho-. Su réplica espera su turno que, con presencia del presidente de la Generalitat será un acto solemne. Algunas fuentes apuntaban a que podría ser el día 15 o el 16; es decir, prácticamente coincidiendo con el inicio de las fiestas. Todo está a la espera de lo que diga en estos momentos el gabinete de Francisco Camps.