Las tareas de extracción de sal en la laguna de Torrevieja -la llamada "cosecha"- se alargarán hasta el próximo 15 de julio, hecho que se produce por primera vez en la historia de la explotación salineras local.

La prolongación de la campaña está motivada, según fuentes de la dirección local de la multinacional gala que la explota con el nombre de Nueva Compañía Arrendataria de las Salinas de Torrevieja (NCAST), a las "excepcionales" precipitaciones registrada durante este mes, en el cual se han contabilizado hasta 62 litros por metro cuadrado.

Este hecho, unido a que durante en 2009 la ciudad Torrevieja registró el tercer año más lluvioso desde casi medio siglo, al totalizarse 472, 5 litros por metro cuadrado, han originado que el proceso de cuaje de sal en el fondo de la laguna se encuentre actualmente paralizado.

Peligro

Las lluvias constituyen el mayor peligro para las explotaciones salineras pues el agua dulce diluye la sal.

En Torrevieja la sal se saca del fondo de la laguna y se transporta a tierra en barcazas. La NCAST espera alcanzar una producción de 700.000 toneladas de sal en la presente campaña, lo que supondría cien mil menos que en la anterior.

Desde la entrada en funcionamiento, en la última década de los años 70, del saleoducto que trasporta sal gema diluida en agua desde los yacimientos situados en Pinoso hasta el humedal salinero, la cosecha, de no mediar lluvias torrenciales, siempre ha comenzado a principios de agosto y ha terminado a final de junio, dedicándose los trabajadores durante los meses más calurosos del año a tareas de mantenimiento.

Al contar la laguna salinera con un nivel más alto de agua por las lluvias, la empresa salinera espera poder matar dos pájaros de un tiro, pues, por un lado, aprovechará los quince días de prolongación de la cosecha para extraer la sal acumulada en las orillas de la laguna; y, por otro, seguirá destinando un mes a los trabajos de mantenimiento, como es habitual, por lo cual la campaña 2010-2o11 se iniciará en la segunda quincena de agosto, cuando está previsto que la sal, aunque con retraso, se encuentre ya cristalizada en el fondo del humedal salado.