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La Policía Nacional de Orihuela ha detenido a doce miembros de un clan familiar dedicado presuntamente a la venta de sustancias estupefacientes a pequeña escala, sobre todo cocaína y hachís, en locales de ocio de la zona, según han informado hoy fuentes policiales.

Los arrestos se han practicado el pasado viernes en un amplio operativo policial desarrollado en la pedanía de La Murada, donde también se han registrado cinco viviendas.

En esos domicilios, los agentes se han incautado de 25 gramos de cocaína, 154 gramos de marihuana, 40 gramos de semillas de marihuana, 3,7 gramos de hachís, once pastillas de éxtasis, 370 gramos de sustancia para manipular la droga y libretas con anotaciones relacionadas, al parecer, con el narcotráfico.

También han intervenido tres balanzas de precisión, 5.200 euros en efectivo y una escopeta de caza.

En sus investigaciones, los policías identificaron a dos matrimonios que eran los principales encargados de adquirir la droga para su posterior distribución, para lo cual eran ayudados por el resto de detenidos, igualmente familiares en distintos grados de parentesco.

Los supuestos integrantes del clan formaban un grupo "prácticamente cerrado y de difícil acceso para cualquier persona ajena a él", lo que dificultaba aún más las pesquisas, han explicado las mismas fuentes.

Los detenidos, de entre 25 y 44 años, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Orihuela en funciones de guardia.