El PSOE va paso a paso y la expulsión de Manuel Vera del partido no será la única a tenor por cómo se están moviendo las cosas en el grupo municipal. Las tres ediles que le mantienen aún como portavoz de los socialistas -María Jesús Díaz Puebla, María Luisa Zafra y Guadalupe Díaz- tienen todos los números para verse envueltas en un procedimiento de expulsión similar habida cuenta del desafío que mantiene por este respaldo tanto con la dirección provincial como con la Ejecutiva local; especialmente, con el secretario de Organización, Federico Buyolo, a quien pidieron una entrevista al mismo tiempo que trascendía el expediente contra Vera, y con el secretario local, Ángel Sáez, quien fue denunciado por Zafra y absuelto de una falta de maltrato hace dos meses.
El PSOE, primero, quiere resolver el "caso Vera" y que el último cartucho que le queda, el recurso ante el Comité de Derechos y Garantías, se resuelva en su contra para que la expulsión sea firme. Después se abrirá expediente a las tres ediles que, probablemente, seguirán el mismo camino. La decisión no ha sido fácil porque, de hecho, responsables del PSOE han buscado un acercamiento con alguna de ellas para intentar que terminara su apoyo a Vera, lo cual le habría dejado en minoría en el grupo municipal y habría permitido su expulsión como portavoz. Fuentes de la dirección socialista explicaron al diario que el alcalde, Pedro Hernández Mateo, se ha posicionado claramente en apoyo a Vera y que buena prueba de ellos es que haya sido incapaz aún de dar lectura en el pleno al escrito que hicieron llegar sobre la expulsión del portavoz municipal.
Conflicto
La Ejecutiva local cree necesario resolver el conflicto de una vez por todas para poder comenzar a trabajar de nuevo de cara a las próximas elecciones. De hecho, se está buscando una nueva sede y se quiere sacar a 60 personas a la calle para vender la nueva gestión y el proyecto del partido para captar electores de cara a las próximas municipales.
