El edificio del viejo Teatro Chapí ha comenzado a ser derribado esta semana para levantar otro completamente nuevo, poniendo así en marcha uno de los proyectos más esperados e importantes de los crevillentinos, que se espera que sea una realidad en 2010.

El alcalde de Crevillent, César Augusto Asencio, señaló que "gracias a un convenio esta obra es financiada al 100% por la Generalitat Valenciana".

Los trabajos del derribo van a durar aproximadamente un mes y se ejecutarán en tres fases. En primer lugar, se está demoliendo lo que era la entrada del antiguo Teatro Chapí. El segundo paso será retirar el techo de este inmueble desmontando manualmente el material de uralita que forma la techumbre. Como el material es muy contaminante no se puede emplear la pala, ya que la normativa obliga a que su retirada sea muy cuidadosa para que los residuos sean gestionados por un eliminador de residuos autorizado en un vertedero especial. Una vez se desmonte el tejado se demolerán los tabiques, paredes y el piso. A continuación, previa aprobación del proyecto de ejecución del nuevo teatro, se sacará a licitación el proyecto de construcción una vez comprobada la firmeza y resistencia del suelo. Según explicó el alcalde, "a final de este año, si no hay demora, podrán comenzar las obras, que se prevé tendrán una duración de dos años".

Dado el importante coste de este proyecto, la licitación se tendrá que publicar en el Boletín de la Unión Europea. La inversión total que se prevé realizar rondará los 7 millones de euros.