«Ha sido un año lleno de aprendizajes. Hemos contado con unos profesores de alto nivel, grandes profesionales que han compartido con un maravilloso grupo de alumnos sus conocimientos. Creo que salen muy bien preparados para el mundo laboral de la fisioterapia en estas técnicas que están a la vanguardia de nuestra profesión. Hemos conseguido poner nuestro granito de arena en la preciosa tarea de convertirlos en mejores profesionales».

Con estas palabras resumía Yolanda Noguera, profesora de Fisioterapia del CEU en Elche y codirectora del Título de Experto en Neuromodulación Percutánea y Técnicas Invasivas, la experiencia de haber preparado durante un año a casi 30 profesionales a través de un proceso formativo pionero en España para tratar el dolor y las disfunciones músculo-esqueléticas.

Para Fran Ortega y Raúl Valdesuso, profesores de este curso y creadores de esta técnica, en esta primera edición se ha pretendido «dotar al alumno de habilidades en el mundo de la fisioterapia invasiva, desde una perspectiva basada en el conocimiento exhaustivo de la anatomía, neurofisiología y la Neurociencia actual, que le permitirá aplicar o no las técnicas invasivas en base al razonamiento clínico y a la identificación y conocimiento de los distintos cuadros clínicos que se le presenten».

Y es que la Neuromodulación Percutánea permite intervenir en el funcionamiento del sistema nervioso, tanto periférico como central, generando grandes cambios en el comportamiento músculo-esquelético (fuerza, propiocepción, dolor. etc.). Con un profundo conocimiento de la anatomía humana, con la ayuda de la ecografía y una buena destreza en el uso de agujas, se puede tratar prácticamente cualquier patología músculo esquelética, aseguran estos expertos.

Los alumnos que ha cursado este título destacan, como asegura Laura Chacopino, tanto que les hayan enseñado «una técnica tan valiosa en nuestro campo de la fisioterapia», como a los docentes que les han formado.

Para Teresa Martínez, el curso «me ha aportado una herramienta de gran importancia y con evidencia científica, para poner en marcha en la clínica». Algo en lo que coincide Ignacio Herrero, quien resalta «que el título te hace ir un poco más allá y ver al paciente de forma más global, no quedarte únicamente en la superficie». Porque, como advierte Álvaro Alcaide, «te lleva a conocer con profundidad toda la variedad de técnicas invasivas disponibles hoy en día».

Profundizar en conocimientos de anatomía, como destaca Ángela Martínez, y en su neurofisiología y el procesamiento del dolor en el paciente, llevará a estos futuros profesionales a un cambio radical en su labor como fisioterapeutas, «que repercutirá en una mejor calidad de los tratamientos y en la calidad de vida de los pacientes asociados a ellos», apunta Rodrigo Ferre. «Ha sido una buena manera de aumentar conocimientos y complementar nuestra propia caja de herramientas», remacha Fulgencio Castillo.

Conociendo el desarrollo psicomotriz acuático

Conociendo el desarrollo psicomotriz acuáticoAsociar contenidos teóricos con los diferentes programas de educación y natación que permiten, desde el nacimiento, una forma lúdica de conocer el medio acuático, además de conseguir una autonomía y desarrollo psicomotriz acuático, base de la futura natación, ha sido el objetivo del taller que estudiantes del grado de Educación Infantil del CEU, en colaboración con la asociación VITAE, han desarrollado para profundizar en los tratamientos acuáticos para niños y personas con discapacidad.

Durante las sesiones, desarrolladas en las piscinas municipales del Plà en Elche, y coordinados por Néstor Alonso, profesor de Educación Infantil y experto en desarrollo psicomotor, y Cristina Salar, docente de Fisioterapia en el CEU, han podido conocer los programas y proyectos de VITAE con bebés y con niños y niñas a partir de los tres años.

«Hasta los 2 o 3 años, el bebé en compañía de sus padres o acompañantes disfrutarán de la piscina, los juegos, las canciones y demás compañeros en un aprendizaje guiado que incidirá en todos los aspectos de su desarrollo psicomotor», asegura Alonso, «y es a partir de esta edad cuando el niño comienza el maravilloso mundo de la natación, consiguiendo la técnica, disfrutando del deporte».

Para Salar, especialista en hidroterapia y atención temprana, y miembro de VITAE, los tratamientos acuáticos son «el complemento ideal a los programas de estimulación y atención temprana de aquellos niños con necesidades especiales que necesiten un apoyo en su desarrollo psicomotor, incidiendo a nivel cognitivo, social, comunicativo y físico, a la vez que disfruta de los beneficios del agua y consigue autonomía».