Con motivo del Día del Dietista-Nutricionista que se celebra este domingo, la sede universitaria Ciudad de Alicante ha acogido una jornada sobre "El nutricionista en la sociedad" que numerosos estudiantes del grado de Nutrición Humana y Dietética han seguido con gran interés, como demostraron con sus numerosas preguntas a los participantes.

Organizada por ADINU (Asociación de Dietistas-Nutricionistas Universitarios), en colaboración con la delegación de estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud y Aula de la Salud, y la empresa ilicitana de catering Lamum, expertos y profesionales de distintas áreas abordaron la restauración colectiva en diversos espacios como los hospitales, los colegios y los geriátricos.

El 24 de noviembre es el Día del Dietista-Nutricionista en España y cada año se propone una temática de interés general para la ciudadanía. Este año el tema elegido es la "alimentación responsable" dentro del ámbito de la restauración colectiva.

Los integrantes de Lamum cautivaron a los futuros profesionales del sector con su iniciativa, que erradica en la práctica la comida rápida y ultraprocesada, de la que todos los expertos urgen que se debe huir desde que los niños son pequeños porque influirá en el adulto del mañana.

"No somos ni veganos ni vegetarianos. En el viaje de los últimos cinco años nuestro valor diferencial es la alimentación saludable con la ética como punto de partida", explicaron desde la empresa.

Concienciados con la sostenibilidad y los productos de temporada y de proximidad, admiten que se ven obligados a pagar hasta quince veces más pero que con su filosofía profesional "hemos roto el hándicap del como rápido y mal con congelados de baja calidad. Cada vez más gente se pasa del fast food al comer bien", afirman.

El 70% de su dieta es integral, a base de semillas, cereales y legumbres "y el 85% de nuestros menús lo pueden comer vegetarianos y personas con intolerancia".

Los estudiantes querían saber cómo se pusieron en marcha e hicieron público su truco: Contactar con la verdulería o la frutería del barrio, donde se ve que lo que traen los camiones lo cultivan ellos mismos en la zona y contratar toda la producción. "Ni congelamos, ni freímos ni rebozamos", advierten.

Y tienen al nutricionista en la cocina