Un Trabajo de Fin de Máster defendido en la Universidad de Alicante (UA) aboga por la concienciación sobre la diversidad de orientación sexual e identidad de género como forma de promoción económica y social de la capital alicantina. Su autor, Moisés Pulido, que con este estudio ha concluido el Máster en Desarrollo Local e Innovación Territorial en la institución académica, defiende que hacer que Alicante se identificara como una ciudad «amiga» de lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales (LGTBI) no sólo podría dar pie a que se desarrollaran los servicios turísticos orientados a este segmento de la población, sino que, sobre todo, se lograría una mayor sensibilización sobre esta cuestión y se abrirían más opciones para el comercio y el empleo, además de mejorar la imagen pública de la ciudad.

Para ello, Pulido propone que Alicante se declare de manera oficial como un municipio «LGTBI friendly», ya que considera que eso daría pie a que se pudiera desarrollar una oferta de turismo y de ocio local específica para este colectivo, al mismo tiempo que se incidiría en la concienciación social. En este sentido, el alumno de la UA sostiene que se lograría una imagen de «ciudad acogedora» para estas personas, y que eso favorecería «su posicionamiento como un lugar atractivo» para potenciales turistas. Pero además, cree que así se podría implicar al comercio local, «y con ello a la población en general», no sólo ofreciendo productos específicos, sino sensibilizando en general a los propietarios de establecimientos en «dar visiblidad y normalidad a la diversidad».

En este sentido, el estudio hace hincapié en las posibilidades de dar empleo a personas en situación especial de vulnerabilidad, como los transexuales, a quienes por lo general «les es más complicado acceder al mercado de trabajo, únicamente por su aspecto físico o porque el nombre que aparece en su DNI no coincide con aquel que sienten que les identifica». Para lograrlo, Pulido apela a la creación de una bolsa de aspirantes por parte de la administración local, o que se haga uso de la fórmula del «currículum ciego», en el que se omiten ciertos datos personales que pueden generar un prejuicio y el consiguiente obstáculo para encontrar empleo. Asimismo, se apuesta por un fomento de las actividades culturales orientadas a la sensibilización en materia de diversidad de orientación sexual e identidad de género, que a su vez podrían ser también generadoras de empleo, como cualquier servicio o producto nuevo que se desarrollara.

El estudiante de la UA considera que Alicante «tiene un gran potencial» para el desarrollo de estas iniciativas, al ser una ciudad con un sector turístico y comercial potente y contar además con una importante trayectoria en el asociacionismo LGTBI. Al respecto, estima que con propuestas como éstas también se podría dar un mayor impulso a la celebración del Orgullo que se lleva a cabo todos los años, ampliando la oferta de actos o incluso dándoles una cierta continuidad a lo largo del año. Al hilo de esto, también valora acciones como el Salón de la Diversidad anunciado para el próximo mes de noviembre en la Institución Ferial Alicantina, y apela a incidir en esta línea.

Con todo, Pulido recalca que «esto no debe verse como un fomento del llamado "capitalismo rosa", sino de la concienciación». Así, insiste en que «lo principal es salir del tópico y dar una imagen de ciudad acogedora con la diversidad y segura» para su expresión en un ámbito público. El tribunal que valoró este trabajo, calificado con una nota de 9, destacó precisamente, según afirma el autor, el «realismo» de sus propuestas.