El Mediterráneo permite en la Costa Blanca disfrutar plenamente de sus aguas, tanto en superficie como en sus fondos. Algunos de ellos protegidos como la Reserva Marina de Tabarca y la Reserva Natural del Cabo de San Antonio, entre Dénia y Xàbia, donde los submarinistas tienen rincones paradisiacos de flora y fauna marina.

En superficie, la vela es una de las prácticas con mayor acogida, dado que estamos en una zona de vientos suaves y numerosas escuelas de iniciación. A ello se unen el windsurf, el kitesurf, el esquí acuático, las motos acuáticas, el piragüismo, el remo, e infinidad de actividades, como el senderismo acuático, una experiencia diferente y única en la que dar un paseo por el fondo marino, a tan sólo 5 metros de profundidad.

También cabe destacar las competiciones náuticas y citas deportivas que tienen lugar a lo largo de todo el año.

Sin duda, uno de los principales encantos que consigue atraer a estas costas a un gran número de turistas cada año.

1- Flyboard

Para lanzados. Consiste en subirse a una tabla que, propulsada por el agua, nos puede elevar hasta 12 metros por encima del mar, por lo que se puede considerar una actividad recomendable para los amantes de los deportes de riesgo. Los principiantes se conforman con mantenerse en equilibrio, pero aquellos que llevan practicándolo bastante tiempo pueden llegar a realizar figuras y acrobacias en el aire. Es un deporte muy divertido ideal para liberar tensiones y que, además, es bueno para ejercitar piernas, glúteos y abdomen.

2- Paddle surf

Origen polinesio. Consiste en desplazarse por el agua con la ayuda de un remo subido sobre una tabla de surf. Su práctica supone gran entrenamiento físico, por lo que muchos atletas de primer nivel lo practican dentro de su rutina de preparación. Perfecto para corregir malas posturas corporales y para impulsar la estabilidad del tronco, se trabaja todo el cuerpo, especialmente abdomen y piernas.

Es uno de los deportes universales más practicados en todo el mundo por su fácil accesibilidad, por ser apto para todas las edades y condiciones físicas, la diversidad de lugares donde practicarse y por sus beneficios para la salud física y mental.

3- Kitesurf

Propulsado por una cometa. Similar al windsurf, se diferencia en que el deportista se propulsa mediante una cometa y no a través de una vela. La persona que va sobre la tabla está más activa que en el caso del windsurf porque, además de desplazarse por el agua, puede dar saltos y realizar acrobacias en el aire gracias al impulso del viento.

El kitesurf es mucho más físico, con lo que se trabaja prácticamente todo el cuerpo (torso, brazos, piernas, abdomen, glúteos, etcétera). Las mejores zonas para practicarlo en la Costa Blanca son Benidorm, Alicante y Calpe, pues es donde mayor corriente de aire existe.

4- Remo

Deporte milenario. Disciplina señorial, reservada en sus origenes a los caballeros, fue una de los primeras en sumarse al olimpismo. Consiste en la propulsión de una embarcación sobre el agua, mediante la fuerza muscular de uno o varios remeros, cada uno de ellos usando uno o dos remos como palancas.

Extremadamente físico y competitivo, que es cuando realmente se mide la destreza y se saca a relucir todo el potencial, resulta muy divertido cuando se practica de forma recreativa. Con este deporte se ejercitan sobre todo los brazos y el tronco, que son las partes corporales con las que se impulsan los remos.

5- Windsurf

Adrenalina pura. Estar sobre una tabla surcando las olas con el único impulso del viento es una experiencia muy gratificante. Además, es una actividad muy física que requiere la implicación de todo el cuerpo, especialmente de brazos y piernas, por lo que no solo se disfruta de la vivencia, sino que también se realiza ejercicio físico. Perfecto para desconectar durante unas horas de la rutina diaria, para desprenderse del estrés y para disfrutar del aire libre.

6- Vela

Disfrutar del mar. Una de las mejores opciones a practicar, exige pericia y un punto de atrevimiento, por ello existen numerosos centros que enseñan a manejar los timones de un velero. La vela cuenta con varias modalidades y hay que distinguir entre la competición (regatas) y el recreo. La primera consiste en realizar un recorrido en el menor tiempo posible, mientras que la segunda se trata simplemente de navegar sin rumbo simplemente por el mero hecho de disfrutar del mar.

7- Buceo

Descubriendo tesoros. Sumergirse en las transparentes aguas de la Costa Blanca es una experiencia única que merece la pena probar. Las profundidades del mar de la provincia de Alicante esconden auténticos tesoros en forma de fauna marina, como los bancos de posidonia, y los animales autóctonos.

El submarinismo es un deporte que requiere realizar cursos preparatorios para adquirir ciertos conocimientos. Su práctica trabaja diferentes grupos musculares, amplia la capacidad pulmonar y sobre todo mejora las coordinaciones del cuerpo.