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Hola, soy Dios

Hablando de partidos...

—JC, hacía tiempo que no te veía tan afanado. ¿Se puede saber qué haces? —Estoy escribiendo una tesis celestial

-¿Te? sis? ce? les? tial?

-Sí, Pa. Es que ha subido aquí el decano de una universidad española y me ha propuesto hacer una tesis.

-¿Se puede saber para qué necesitas tú una dichosa tesis? Además, eso requerirá mucho esfuerzo, y tú estás muy ocupado con tus tareas aquí arriba.

-Nunca se sabe lo que nos deparará el destino, Pa. Además, el decano me ha hecho una «ofertita».

-¿«Ofertita»?

-Sí, Pa. Por ser quien soy no me hace falta ir a clase, ni seguir el temario, ni estudiar los las noches, solo presentar un trabajo final? que puede ser fusilado.

-¿Entonces?

-Con pagar las tasas me garantizan el «Cum Laude».

-Vamos a tener que tener unas palabritas con ese tal decano?

-Bueno,Pa, pero mientras tanto me he puesto a hacer mi trabajo, yo no fusilo a nadie.

-¿Y de qué va ese trabajito?

-Pues aprovechando que en España hay elecciones cada veinte minutos, voy a titular mi tesis de manera provocadora: «¿Donde diantre está el centro?»

-¿Perdón, JC? ¿Estás bien? ¿Necesitas vacaciones? ¿Una excedencia de tres milenios?

-No, Pa. Estoy en plenitud mental y física. Y el tema me apasiona. Verás. La Revolución Francesa abolió el sistema representativo anterior, por estamentos, y se originaron los partidos políticos, para coordinar la acción de los ciudadanos. Los girondinos y los jacobinos se enfrentaron continuamente y marcaron sus diferencias sentándose en distintos lugares de la Asamblea Nacional, a la derecha y a la izquierda.

-De ahí los conceptos de azules y rojos?

-Algo así, sí. La terminología continúa aún, aunque ha sufrido muchos cambios. En el Reino Unido, los partidos «tory» y «whig» aparecieron en 1679. Posteriormente, el «whig» pasó a ser liberal y acabó convirtiéndose en el partido laborista. Pero ahora todos los sistemas democráticos son liberales, por lo que este término se ha difuminado en parte. En su origen fue progresista frente a los absolutistas y ahora el liberalismo económico se alinea principalmente con las ideologías conservadoras.

-Comprendo. Bueno, no sé si comprendo mucho.

-Paciencia. La mayor parte de sistemas democráticos mantienen aún una estructura dicotómica más o menos imperfecta. Y aquí llegan los partidos de centro para resolver este precario equilibrio, ese bipartidismo.

-Pero hay quien niega que haya una ideología de centro. Algunos progresistas consideran que el centro beneficia siempre a los conservadores porque amortiguan sus aspiraciones de progreso.

-Veamos, los conservadores plantean el Estado como su mínima expresión, porque creen que lo contrario es un peligro para la libertad y si se engorda al monstruo se puede convertir en un depredador. Lo quieren para proveer de seguridad de los ciudadanos y defender los derechos individuales, en especial el derecho de propiedad. Pero, sin embargo, los progresistas aspiran a un Estado mucho más intervencionista, que asegure el bienestar para la mayoría y compense las desigualdades, sobre todo redistribuyendo las riquezas.

-Eso es la esencia de las diferencias entre derechas e izquierdas.

-Pero los conservadores creen que la solución a la desigualdad la tiene el libre juego del mercado y que la intromisión estatal solo la desequilibra más. Los progresistas piensan que el mercado es una fiera desbocada que acaba cayendo en manos de un capitalismo desenfrenado.

-Sí, creo que así es.

-Los conservadores defienden la libertad con la no intervención. Los progresistas la protegen mimando los derechos sociales. Los conservadores defienden una moral familiar tradicional y los derechos naturales „como el de propiedad„, mientras que los progresistas defienden una concepción más abierta de la moralidad y más convencional de los derechos. Los conservadores piensan que el último responsable del comportamiento de un individuo es el mismo individuo, mientras que los progresistas piensan que el responsable es la sociedad.

-Uffff? vaya maratón, JC. ¿Pero no será esto un poco maniqueo? ¿Concepciones muy separadas, muy blancas o muy negras? ¿Actualmente las cosas no son más grises?más mestizas?

-Celebro que me digas eso, Pa. Porque llegamos a la concepción moderna del centrismo, discutida, porque para algunos no es más que partidos de derechas o izquierdas, pero moderados, una especie de pensamiento biconceptual.

-¿Perdón?

-Pues que piensan de modo conservador en determinados aspectos y de modo progresista en otros.

-Ejemplos.

-Pues imagínate un partido socialista centrado que defienda a la vez el matrimonio homosexual, la investigación con células madre pero se mantenga en política económica general dentro de las directrices del liberalismo económico.

-Eso se ha llamado socialismo liberal.

-¿Y no es eso una traición a las esencias progresistas y una victoria de los conservadores?

-Yo no lo veo así, lo veo como una victoria del pragmatismo. Como un partido conservador que defienda a la vez la propiedad privada y la intervención en el medio ambiente, para conservar el hábitat humano, y que procure la igualdad entre hombre y mujer.

-No sé, JC, si en esto tampoco nos vamos a poner de acuerdo. Con lo bien que estábamos con los rojillos y los azulones?

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