«El artista es la mano que, mediante una y otra tecla, hace vibrar adecuadamente el alma humana», señaló el pintor y teórico del arte Kandinski. Así sucede con Essere, el proyecto experimental en el que han intervenido dos disciplinas -arte plástico y música- durante todo el proceso creativo, de la mano del músico y compositor Carlos Izquierdo y la artista plástica Natalia Pérez Chazarra.
Un tándem que se verá en acción mañana a las 20 horas durante el concierto presentación de la obra en la Caja Negra de Las Cigarreras, que se suma otro año más a la celebración del Piano Day, impulsado por el compositor alemán Nils Frahm y que se realiza el día 88 del año, ya que es el número de teclas que tiene el piano. En un día tan señalado, Essere verá la luz tras más de un año de intenso trabajo.
Durante la presentación se va a ir desplegando el libro, para que al final del concierto se contemple toda la pieza de arte abierta. El público podrá acercarse al escenario y recorrerla entera, ya que, como adelanta Natalia, se trata de «una obra plástica tridimensional y con una secuencia de lectura. De una simple vista no se puede entender». Tiene, digamos, «muchas puertas que abrir, que se han ido componiendo durante todo este año». Por eso lo denominan «libro»: porque tienes que ir pasando las «puertas» como si fueran páginas.
Al igual que en anteriores trabajos, como El pianista mínimo, Carlos Izquierdo se mantiene fiel a componer impulsado por un concepto o reflexión que impregna su música de una dimensión filosófica. En este caso, Essere es una reflexión «acerca del acto de renacer y de la esencia que persiste como un eco en determinados objetos que han formado parte de una existencia humana», un proceso conjunto que ha realizado junto a Natalia Pérez, especializada en el libro objeto como lenguaje plástico, conjugando en esta ocasión diversos materiales y técnicas, como son el gofrado, planchas de grabado, madera, papel, teclas de piano, caja de música, etc.
De esta forma, la pieza de Natalia tiene una secuencia de lectura marcada por la música, y la música compuesta por Carlos refleja la esencia poética del libro de la artista. ¿Punto de partida? Destrozaron un piano en desuso y con recuperación inviable. Un inicio catártico para él también: «Un poco como matar al padre, por el hecho de estar despiezando tu herramienta de trabajo». Algunas piezas de la mecánica del piano se las quedó. Entre ellas alguna tecla que acabó en las manos de Natalia Pérez.
A partir de este objeto generó una estructura muy parecida a una escultura con mecánica, durante aproximadamente medio año. Y, cuando completó la creación del libro objeto, vio claro que necesitaba «respirar musicalmente», que necesitaba esa música para vivir. Y es que Essere «significa esencia. El concepto es de renacimiento. Esas teclas -reflexiona Natalia- ya no tocan como tocaban, pero tocan de otra forma. No han perdido del todo su naturaleza, pero se han transformado en una cosa muy distinta». Reviven.
Así, tras la obra de ella, Carlos empezó a componer el que es su cuarto álbum, con seis piezas para piano y dos piezas para la cajita de música, en el que lo más novedoso es que ha sido grabado desde el interior de un piano, para conseguir captar la arquitectura resonante del instrumento.
Essere
«La textura y la distribución de las piezas en la obra de Natalia me ha sugerido una forma de acercarme al piano como un objeto que capta resonancias y genera ecos». Este acercamiento hacia su «arquitectura» le llevó a colocar los micrófonos dentro del piano para captar el ruido y el sonido de su mecánica: el roce de las teclas, el toque de los martillos, el ruido del arpa, incluso el aire que recorre el piano por dentro?Captar ese sonido que vibra. No solo el sonido «limpio» de la música, añade Carlos Izquierdo, sino captar la personalidad del piano. Su essere.
Esta forma de grabar desde las vísceras ya está a la venta en cd. Pero para captar el proyecto en su totalidad, hay que vivirlo completo en una ocasión única, como la que mañana se vivirá en Las Cigarreras. Un evento en el que también estarán disponibles una serie limitada de 10 libros pequeños de artista, que contienen todo el proceso del proyecto. Al abrirlo tiene un formato fuelle, donde encontramos fotos, apuntes, dibujos y el cd. Como un tesoro. Así, «un piano destrozado, condenado al olvido, ahora revive en estas obras» señalan los autores de Essere.
