Cien años después del fallecimiento de Egon Schiele, parece ser que los alemanes y los británicos no se hallan todavía preparados para contemplar sus desnudos. Al menos así lo creen las autoridades de esos países, que han prohibido los carteles de la exposición de Viena que mostraban los famosos desnudos del pintor. En un gesto de inteligencia, la Oficina de Turismo vienesa ha decidido continuar con la campaña, agregando en cada cartel una banda que esconda los genitales, con la leyenda «Lo siento, tiene 100 años pero es demasiado atrevido para hoy».
