La Guardia Civil ha detenido en el puerto de Dénia a un pasajero que pretendía embarcar en un ferry a Palma de Mallorca con 40 kilos de hachís ocultos en el maletero de su vehículo.
La detención fue realizada el pasado domingo por la tarde en la zona de embarque. Agentes del Área Fiscal de la Guardia Civil de Dénia inspeccionaron un coche de alquiler conducido por un español de 40 años que pretendía embarcar para realizar la travesía de Dénia a Palma.
La inspección era de carácter rutinario, una más de las que habitualmente realiza la Guardia Civil, y los agentes descubrieron la droga al revisar el maletero del turismo. Había un carrito de bebé y al levantar la alfombrilla del maletero descubrieron numerosos paquetes rectangulares envasados al vacío en cuyo interior descubrieron que estaban llenos de polen de hachís.
A disposición judicial
Tras la incautación del hachís la Guardia Civil procedió al arresto del conductor como presunto autor de un delito contra la salud pública.
El arrestado fue trasladado a dependencias de la Guardia Civil y tras instruir las correspondientes diligencias ayer fue puesto a disposición del juzgado de guardia de Dénia.
Según informó ayer la Comandancia de Alicante, la droga habría alcanzado un valor superior a los 67.000 euros en el mercado ilícito y presumiblemente el alijo estaba destinado a su venta al menudeo.
La línea marítima que une Dénia con los puertos de Ibiza, Formentera y Palma se convierte cada verano en un punto caliente para el tráfico de drogas debido al aumento de la demanda de sustancias estupefacientes. No obstante, los efectos de las pandemia se han notado en las islas y probablemente no haya una demanda de droga al mismo nivel de otros veranos. Aún así, la Guardia Civil mantiene la alerta para detectar cualquier envío de droga en los ferrys que zarpan de Dénia. De hecho, los 40 kilos incautados el domingo son el primer alijo que se decomisa este verano allí.
