Telejuicios en la era del teletrabajo. Los juzgados de lo Social de Alicante, una de las jurisdicciones donde mayor colapso se prevé por los pleitos laborales derivados de la crisis del coronavirus, se empiezan a preparar para los videojuicios o juicios telemáticos. El juzgado de lo Social número cuatro de Alicante ha realizado esta mañana las pruebas para testear el sistema con el que la Administración de Justicia prevé evitar las aglomeraciones de profesionales y ciudadanos en las instalaciones judiciales y que intervengan en las vistas desde el despacho o su domicilio sin acudir a la sala. Hasta 78 profesionales estuvieron simultáneamente contectados en una videoconferencia, entre ellos la presidenta del TSJ Pilar de la Oliva, para comprobar sus capacidades.
La titular del juzgado ya tiene varias causas que podrían ser enjuiciadas por esta nueva vía telemática y ha celebrado una vista con profesionales para testear la aplicación y valorar su viabilidad para celebrar juicios. Un sistema al que ya se sumó la semana pasada un juzgado de lo Contencioso de Elche que comenzará el próximo lunes a utilizarlo. Tras Elche, el juzgado de lo Social alicantino sería el segundo de la provincia en sumarse a esta iniciativa pionera para celebrar juicios. La semana pasada en la Audiencia de Alicante se celebró la primera vista en la Comunidad mediante este sistema para resolver un recurso en el que se pedía la libertad de un preso preventivo. El juzgado de cláusulas suelo de Alicante ha sido otro de los que se han sumado a la iniciativa y quiere empezar a celebrar videojuicios en junio.
Durante la declaración del estado de alarma se presentaron del orden de más 500 demandas en los juzgados de lo Social, que estaban registrando una media cercana a los 6.000 asuntos anuales. Se estima que estas nuevas demandas registradas durante los meses de la pandemia todavía está muy lejos de reflejar la verdadera avalancha derivada de los ERTEs y EREs que se apliquen en la provincia como consecuencia de la crisis económica por el parón económico. Cuando se vuelva a la normalidad, las limitaciones de aforo al Palacio de Justicia van a estar vigentes y precisamente en el edificio de Pardo Gimeno es uno de los lugar donde mayores aglomeraciones se producen, especialmente por parte de personas que han sido citadas para declarar en un juzgado de lo Social. En cada uno de los siete juzgados de lo Social de Alicante pueden celebrarse del orden de once vistas distintas cada mañana. Asuntos que no necesariamente tienen porqué ser despidos, sino también se resuelve, entre otroas materias, sobre declaraciones de incapacidad o el cobro de prestaciones. La implantación de estos sistemas telemáticos va a ser una de las alternativas con las que trabajará la Administración de Justicia para que las restricciones no supongan una demora aún mayor.
En el juzgado de lo Social cuatro de Alicante hay al menos una decena de asuntos que deben juzgarse en la próximas semanas y hay cerca de ocho susceptibles de ser enjuiciados por este nuevo sistema. La decisión no está tomada oficialmente aún y, en los próximos días se irá notificando a los personados en dichos pleitos. En la vista celebrada esta mañana para probar el sistema, hasta un total de 78 profesionales estuvieron conectados simultáneamente a la videoconferencia para conocer hasta dónde pueden llegar la capacidad. Un trámite con el que se pretende evitar que los posibles fallos técnicos se detecten el mismo día del juicio y permite a los profesionales que planteen sus dudas.
Los magistrados de lo Social han optado en su última junta por combinar los juicios telemáticos con aquellos en los que es necesaria la presencia en la sala de los afectados en el proceso y advertían de que sin un plan adecuado de refuerzos sólo se podrá señalar la mitad de los juicios señalados. El refuerzo mínimo que piden es de cuatro magistrados, un letrado de la Administración de Justicia y un funcionario para que celebren las 1.500 vistas suspendidas durante el estado de alarma. A un ritmo de 25 juicios a la semana durante sesenta semanas conseguirían ponerse al día. Las agendas de los juzgados de lo Social estaban ya completas antes del estallido de la pandemia hasta el año 2021 y había algunos asuntos no urgentes que se están señalando en 2022. De no aprobarse un plan de refuerzos, temen que el colapso sea aún mayor para ponerse el día.
A partir del lunes 1 de junio, el juzgado de lo Contencioso Administrativo número uno de Elche tiene programados nueve juicios telemáticos mediante este sistema, por lo que será el primero de la Comunidad Valenciana en utilizarlo. Se trata de un procedimiento pionero que ha puesto en marcha la Conselleria de Justicia para fomentar el uso de los videojuicios. La herramienta combina el sistema Arconte (la aplicación que usan los juzgados para grabar los juicios) con la aplicación informática para videoconferencias Webex con la que se han celebrado las reuniones entre los miembros que integran las comisiones de seguimiento de la pandemia en la Administración de Justicia. La pandemia está obligando a ir incorporando las nuevas tecnologías a marchas forzadas a la rutina de los juzgados. Durante el estado de alarma, los juzgados de guardia ya habían empezado a tomar declaración a los detenidos por videoconferencia conectados con la Comisaría para evitar el traslado de presos al Palacio de Justicia. Aunque ya hay jueces que han advertido de que prescindirán del sistema si ven que suponen cualquier merma de las garantías procesales.
