El narco apodado El Califa ha sido detenido en Alicante al ser sorprendido con droga oculta en los genitales durante uno de los controles que se están estableciendo para cumplir el estado de alarma, según han confirmado a este diario fuentes policiales. La Audiencia de Alicante le condenó a 21 meses de prisión el año pasado en un juicio a su red de tráfico de drogas que se saldó con una conformidad. El arresto se produjo el jueves por la Policía Local de Alicante cuando el sospechoso circulaba con su vehículo por la avenida del Pintor Pérez Gil. Le ntervenieron 53 gramos de hachís, que transportaba oculto en sus partes íntimas.

Los agentes de la Unidad Fox y la Canina de la Policía Local dieron el alto a este vehículo cuando estaban realizando controles para hacer cumplir las medidas establecidas en el estado de alarma del Gobierno frente al coronavirus, en distintas zonas y accesos a la ciudad, al observar a este turismo sospechoso al llegar al lugar habilitado al que le dieron el alto. Los hechos ocurrieron en la jornada del jueves, alrededor de las 20 horas horas, cuando un vehículo que accedía al control, fue interceptado para ser identificado y que pudiera acreditar la razón por la que estaba circulando durante el estado de alarma, y al ser preguntado ofreció versiones contradictorias tanto de su lugar de origen como hacia donde se dirigía sin acredita claramente el lugar y los motivos de su desplazamiento.

Según fuentes policiales al despertar las sospechas de los agentes y ver que se estaba poniendo muy nervioso, se le solicitó que bajara del vehículo, para que los agentes pudieran realizar una inspección con los perros de la Unidad Canina. Durante esta inspección, el perro Gus de la Policía Local marcó la zona de los genitales del sospechoso, y se localizó oculta en sus partes íntimas una pieza de 53 gramos de sustancia vegetal de hachís.

Los agentes procedieron a inspeccionar en profundidad el interior del vehículo, localizando más de 770 euros fraccionados en billetes, tres teléfonos y una Tablet. Durante el registro, el perro marcó de forma insistente la zona del maletero, donde se detectaba un olor residual de sustancia estupefaciente pero no se halló droga alguna en su interior.

Los agentes de la Unidad Fox al identificar al detenido comprueban que le constaban decenas de detenciones, y que era uno de los presuntos traficantes de hachís más importantes de la costa levantina. Por tales hechos la Policía Local de Alicante detuvo a esta persona, un varón de 44 años, por un presunto delito de desobediencia y tráfico de drogas, que fue informado de los motivos de su detención así como los derechos que le asisten, trasladado a comisaria y puestos a disposición judicial.

El Califa ha pasado esta mañana a disposición del juzgado de guardia de Alicante donde ha quedado en libertad provisional. Las fuentes consultadas por este diario han señalado que el arrestado ha alegado que la droga intervenida era para su consumo y no estaba destinada al tráfico. La amplia red de contactos que el califa tenía en Marruecos de proveedores de hachís hizo que las fuerzas de seguridad le consideraran el responsable de una de las redes de tráfico de esta droga más activas de Alicante. La operación por la que fue condenado el año pasado se remontaba a abril de 2012, tras la iintervención de una cargada 2.700 kilos de hachís. Los agentes comenzaron a investigarle ante su elevado tren de vida, a pesar de no desarrollar actividad laboral alguna. Los antecedentes penales del acusado por tráfico de drogas y sus contactos con personas relacionadas con el envío de hachís, motivaron que en aquella operación el sospechoso fuera sometido a vigilancias y seguimientos, en un primer momento; y a la intervención de su teléfono, después.

Otros arrestos

Por otro lado, el Grupo Operativo de Intervención Rápida de la Policía y la UPR interceptaron en otro control policial situado en la calle Barítono Paco Latorre, a una persona de 31 años, cuando circulaba con un vehículo a pesar de haber perdido todos los puntos del carné de conducir.

Los agentes dieron el alto a su vehículo sobre las 18 horas del jueves. Al solicitar al conductor que se identificara, comprobaron que carecía de permiso de conducción por haber perdido todos los puntos. Por ello, la unidad de Atestados de la Policía Local le ha instruido diligencias al juzgado de Guardia por un presunto delito de conducción sin permiso de conducir al haber perdido todos los puntos.