Las autopsias realizadas ayer a los cadáveres del hombre de 40 años y la mujer de 44 fallecidos el pasado lunes en Alicante confirmaron que el fallecimiento se produjo a causa de la intoxicación causada por la ingestión de alcohol de 96 grados que mezclaron con refrescos durante una fiesta familiar celebrada el pasado fin de semana en un domicilio del barrio de Los Ángeles. Otros dos asistentes a la fiesta están hospitalizados, uno de ellos en la UCI.

El varón fallecido, de origen boliviano, y la mujer, de nacionalidad ecuatoriana se reunieron en una fiesta familiar el pasado sábado por la noche a la que acudieron seis personas y varias de ellas acabaron bebiendo el cóctel mortal.

Según los datos recabados por los investigadores del Grupo de Delincuencia Violenta de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, además de los dos fallecidos, otras dos personas que estaban en la reunión también ingirieron alcohol etílico y las otras dos no llegaron a probarlo.

Los testigos han relatado a la Policía que una vez se terminaron las cervezas que había en el domicilio optaron por usar alcohol para mezclarlo con refrescos y previamente lo calentaron, presumiblemente para reducir su alta graduación.

Efecto letal

Sin embargo, los efectos de la ingestión de esta explosiva mezcla resultaron letales. Pese a que las bebidas las ingirieron la madrugada del pasado domingo, la reacción mortal no ocurrió hasta el pasado lunes a mediodía.

El varón de 40 años comenzó a ahogarse en un domicilio de la avenida de Elche donde trabajaba cuidando a un matrimonio de personas mayores. Un hijo de esta pareja fue el que dio aviso a los servicios de emergencia comunicando que no podía respirar, pero los sanitarios no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

Posteriormente, la pareja de una mujer de 44 años residente en la calle Cerdá llamó a emergencias para pedir ayuda porque su mujer no podía respirar. La mujer también acabó falleciendo sin que los servicios de emergencia lograran salvarla.

La Policía Nacional relacionó ambas muertes y averiguó que la causa podría haber sido la ingestión del alcohol de 96 grados mezclado con refrescos. Los investigadores identificaron a otras cuatro personas que estuvieron en la misma fiesta familiar y confirmaron que dos de ellas ni siquiera probaron la mezcla. Un joven de 28 años, sobrino de la fallecida, sí tomó dicha bebida y tras encontrarse en mal estado de salud acudió a un centro hospitalario y quedó ingresado en la UCI, aunque no se teme por su vida.

La última persona admitió a la Policía Nacional que llegó a probar la mezcla pero muy poca cantidad, de ahí que no se encontrase mal. No obstante, tras los dos fallecimientos acudió al hospital para ser examinado y quedó ingresado.