Un acusado de haber estafado en Benidorm a catorce turistas alquilándoles pisos que no eran suyos admitió ayer los hechos y será condenado a un año y nueve meses de cárcel. El juicio se cerró con una conformidad en la Audiencia de Alicante, aunque el hombre se encuentra en prisión preventiva por otros delitos similares cometidos en otros puntos de España.
Los hechos ocurrieron en el verano de 2017. El acusado había ofertado en una web de anuncios el alquiler de apartamentos a cambio de un precio, sin tener los inmuebles a su disposición. Posteriormente, se quedó con el dinero de las transferencias que realizaron las víctimas y que se encontraban sin el piso cuando llegaron a su destino.
