Once acusados de formar parte de un grupo afincado en Alicante que en 2014 se dedicaba a cometer los conocidos como hurtos «amorosos» de joyas y efectos de valor a personas mayores por diferentes municipios de la provincia reconocieron ayer su culpabilidad en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial y no ingresarán en prisión si pagan una multa gracias a un acuerdo de conformidad entre las partes. La Fiscalía modificó su petición inicial de penas de 19 años de cárcel para 11 acusados por delitos de organización criminal, hurto continuado, blanqueo y dos robos con violencia y la rebajó a 21 meses de prisión al aplicar la circunstancia atenuante muy calificada por los robos y pertenencia a grupo criminal, mientras que retiró el delito de blanqueo al considerar que no se ha acreditado.

Asimismo, la pena de 21 meses se podrá sustituir por el pago de multas por un importe de 5.040 euros. Varios de estos acusados fueron defendidos en el juicio por Miguel Ángel Cánovas, Alberto Rodríguez Rozalén, Juan Carlos López Vidal y Alicia Grau Córdoba, del bufete de Francisco Miguel Galiana Botella.

El único acusado que no se conformó con los hechos y se declaró inocente es el dueño de varios comercios de compraventa de oro, para el que la Fiscalía pidió 2 años de cárcel por receptación.