El juicio a un fotógrafo aficionado de Alicante acusado de abuso sexual y prostitución de menores quedó ayer visto para sentencia tras mantener la Fiscalía su petición de penas que suman unos 50 años de prisión y solicitar la absolución el abogado del acusado, que aprovechó el turno de última palabra para reiterar su inocencia y negar los abusos.

Aunque el fiscal mantuvo la acusación inicial de 10 delitos de abuso sexual, 8 de prostitución de menores y uno de elaboración de material pornográfico, durante su informe oral en el juicio no se opuso, a la vista de las pruebas, a una condena alternativa como autor de un delito continuado de abusos sexuales y de un solo delito de prostitución de menores, mientras que el de elaboración de material pornográfico quedaría fuera de la acusación.

Regalos

Como publicó ayer este diario, el fiscal acusa al procesado de ganarse la confianza de los menores haciéndoles fotos y regalos para después intentar tener relaciones con ellos. Dos de los menores eran hijos de amigos y las denuncias se presentaron en 2017, cinco años después de ocurrir los hechos objetos del enjuiciamiento.

El fotógrafo negó la acusación en la primera sesión del juicio y ayer insistió en que no abusó de ninguno de los menores.

El procesado aseguró que tiene publicados varios libros de fotografías y que con su trabajo había ayudado a varios jóvenes en su carrera como modelos. En este sentido, negó que hubiera hecho fotos de carácter pornográfico a los menores, sino que se trataba de fotos artísticas y aportó uno de sus libros como muestra de su trabajo.

Una de las víctimas es hijo de un compañero de trabajo y lo conocía desde que tenía cinco años. Según la denuncia, desde 2012 intentó abusar de él en varias ocasiones. Con otro de los menores mantuvo relaciones a cambio de dinero desde que tenía 17 años.

El tercero de los menores es hijo de un vecino y le habría hecho fotos desnudo e intentado masturbarle. Al cuarto, también le hizo fotos desnudo al conocerle mientras hacía parkour en Alicante.

Además de las penas de cárcel, la Fiscalía solicitaba que el acusado indemnice a una de las víctimas con 15.000 euros por el daño psíquico que le ha causado.