Una gota de sangre encontrada en la escena del delito ha ayudado a la Policía Nacional a esclarecer un robo por el procedimiento del butrón cometido el pasado septiembre en una joyería de Ibiza, donde sustrajeron 22.000 euros en joyas. El principal implicado y otras dos personas, de entre 35 y 58 años y todas de nacionalidad uruguaya, han sido detenidas en Alicante. La investigación ha sido realizada de forma conjunta por agentes de los grupos de Delincuencia Especializada de Alicante y de Ibiza.

El robo fue cometido de madrugada en una joyería de Ibiza donde un encapuchado accedió mediante un butrón realizado desde un almacén contiguo al establecimiento. El ladrón se apoderó de un botín de más de 22.000 euros en joyas y se dio a la fuga.

Los investigadores de la Comisaría de Ibiza iniciaron las pesquisas para identificar al principal implicado, una persona que fue grabada por las cámaras de seguridad de la joyería asaltada y llevaba puesto un pasamontañas para dificultar su identificación.

No obstante, la inspección ocular permitió encontrar restos de sangre en el lugar del robo y la Policía Científica logró identificar a una persona sospechosa.

Las pesquisas de los policías de Delincuencia Especializada de Ibiza se dirigieron hacia un hombre al que siguieron sus pasos hasta situarlo en Alicante. Los investigadores solicitaron la colaboración de sus compañeros de Alicante y estos le detuvieron.

En el momento de la detención, el detenido portaba una cadena de oro de gran valor que fue sustraída en la joyería. Tras el arresto los policías realizaron un registro domiciliario en el que se intervinieron parte de las joyas sustraídas y abundante material usado para la comisión de robos.

Posteriormente detuvieron a otras dos personas que presuntamente colaboraron en la realización del robo y la ocultación de la mercancía sustraída.