Dos hombres de 33 y 44 años han sido detenidos en Benidorm por una estafa informática con la que habrían logrado más de 20.000 euros, según informó ayer la Policía Nacional. Los dos supuestos ciberdelincuentes se hacían pasar por técnicos de una conocida empresa de software y realizaban llamadas telefónicas a sus víctimas para ofrecerles falsos servicios que no necesitaban.

En concreto, les hacían crecer que su equipo informático había sido infectado o «hackeado», o que los certificados estaban caducados. Así las víctimas facilitaban el control remoto de su ordenador a los ciberdelincuentes, los cuales accedían a las claves de banca online, datos de su tarjeta de crédito y demás contraseñas para efectuar de forma ilícita transferencias a la cuenta de uno de los arrestados.