«Aún no nos hacemos a la idea, no se nos va de la cabeza». Así de conmocionado seguía ayer un vecino que desde el balcón contaba al diario la tragedia registrada en el barrio de Altabix, que no recuerda que se hubiese producido antes un capítulo tan lamentable como el crimen machista que se llevó la vida de María Asunción Pérez Ibarra, de 47 años, a manos supuestamente del que aún era su marido, P.M.C., nacido en 1968. Un nuevo caso de violencia machista que ha dejado en estado de shock a esta barriada ilicitana y que recibió el rechazo de toda la sociedad.

El arrestado se encontraba ayer en dependencias de la Comisaría de Elche a la espera de pasar hoy a disposición judicial, habida cuenta que confesó el crimen minutos después de cometerlo en el aparcamiento subterráneo de la calle Felipe Moya, donde estaba esperándola. Todo va a depender de la labor de recopilación que está realizando el Cuerpo Nacional de Policía y de si quiere o no prestar declaración el acusado en sede policial. En cualquier caso, ya se le ha facilitado abogado.

El grupo de Policia Judicial de la Comisaría de Elche se ha hecho cargo de la investigación y de las diligencias que se remitirán al juzgado hoy junto con el resultado preliminar de la autopsia, que se practicará hoy al cadáver de María Asunción. Por este motivo la familia no ha recibido aún el cuerpo de la víctima, ya que los domingos no se realizan autopsias.

El juzgado, a la espera del informe policial, abrirá un procedimiento previsto en la Ley del Jurado y, aunque se desconoce la calificación de los hechos, todo apunta a que será la de asesinato. La mujer, como adelantó ayer este diario, falleció a consecuencia de las puñaladas que recibió en el torso, alguna de las cuales le afectó órganos vitales. También presentaba cortes en el cuello y en manos y brazos, de carácter defensivo, al intentar evitar la agresión. La frialdad con la que narró los hechos el acusado a la primera persona que se cruzó, aún con las manos ensangrentadas, tras abandonar el aparcamiento de la calle Felipe Moya, a quien dijo «he hecho lo que debía», según indican algunas fuentes, hace pensar que la investigación y la posterior instrucción, dentro de su complejidad, será sencilla pues los hechos están meridianamente claros.

Tras pasar a disposición judicial, el juzgado, en cualquier caso, quiere acelerar la reconstrucción de los hechos cuanto antes para devolver la calma al barrio. La fiscalía pedirá tras escuchar su testimonio su ingreso en prisión comunicada y sin fianza. La pareja estaba en trámites de separación y desde hace una semana no convivían en la misma casa, en Altabix.

Tenían dos hijos, uno de los cuales estaba esa noche en el domicilio familiar, a pocos metros de donde perdía la vida su madre. El otro había pasado la noche fuera de casa. El hombre accedió al aparcamiento porque disponía de otro mando a distancia e iba armado con un cuchillo que fue recuperado en la escena del crimen. No existían denuncias previas de malos tratos en la pareja.

Pacto contra la violencia

Por otra parte, el Consell reivindicó ayer el Pacto Valenciano contra la Violencia de Género como la herramienta para combatir la violencia machista. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, hizo un llamamiento a combatir unidos el terrorismo machista para expulsarlo de todos los espacios de la sociedad, reiterando su repulsa por el asesinato de Elche.

Las muertes por violencia de género se triplican en siete meses en la provincia

El pasado año se registró una única víctima mortal en Orihuela, mientras que en 2019 han sido asesinadas ya tres mujeres

Sheila fue la primera asesinada en Planes, después fue Andrea en Rojales, y ahora María Asunción en Elche. Tres mujeres han visto ya en lo que va de año como supuestamente les arrebataban la vida sus parejas o exparejas en la lacra de la violencia machista. Una tragedia que ya triplica los casos mortales registrados en 2018 en la provincia, cuando una mujer, Ivanka, fue estrangulada por su pareja en Orihuela.

El primer caso de este año ocurrió en la pequeña localidad de Planes, en El Comtat. Sheila, de 29 años, fue asesinada a manos de su pareja, Jorge B. C., de 34 años, el pasado mes de febrero. El asesino trató de simular que había sido un suicidio en el que la chica se había degollado, pero la posterior autopsia determinó que presentaba heridas incompatibles con el suicidio, ya que también tenía traumatismos en la cabeza, por lo que fue detenido y encarcelado. La mujer tenía cinco hijos, uno de ellos de unos pocos meses con el agresor.

En Rojales un hombre de 45 años acabó con la vida de Andrea el pasado mes de abril. Su cadáver fue encontrado con signos de violencia en la vivienda que compartían, siendo arrestado su pareja.

Con la muerte el sábado de María Asunción son ya 31 las mujeres asesinadas en España, la 1.006 desde 2013. el sábado otro hombre mató a María Asunción en Elche.